Una quiche es un fabuloso entrante para tus comidas o cenas navideñas. Esta es de salmón pero tiene la particularidad de que lleva muy poco huevo en el relleno, al que también echamos crema de queso de cabra, nata, sal y pimienta. Una vez que sacamos la masa del horno, ponemos por encima unos trozos de salmón fresco y unas ramitas de eneldo fresco. ¡Un bocado irresistible! Puedes cortarlo en triangulitos y servirla como aperitivo.
- 1 unidad de Masa quebrada (pasta brisa)
- 100 g de Queso de cabra cremoso
- 500 ml de Nata
- 2 ud de Huevo
- 200 g de Salmón cortado en trozos
- Sal
- Pimienta negra
- Eneldo
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1.
Precalienta el horno a 200 grados.
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2.
Coloca la masa sobre un molde para tartas de modo que queden cubiertos la base y los bordes.
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3.
Pincha con un tenedor la base e introduce en el horno unos 10 minutos. Para evitar que la base no se levante puedes ponerle encima unas legumbres secas que después del horneado retiraremos.
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4.
En un bol mezcla la nata con el queso, los huevos, sal y pimienta.
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5.
Vuelca esta mezcla sobre la base horneada.
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6.
Mete la quiche en el horno a 220 ºC durante 15 minutos. Después baja la temperatura a 150 ºC y deja que se hornee otros 30 minutos más.
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7.
Saca la quiche del horno y coloca por encima el salmón y el eneldo fresco.
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