Lleva un poco de elaboración, pero este plato a base de pechugas de pollo asadas que también lleva cebollitas francesas y kiwi, además de su salsa correspondiente, ¡te encantará! Te recomendamos que uses un buen pollo de corral y que lo pongas a macerar la noche de antes o incluso 48 horas para que tenga más sabor.
- 3 ud de Kiwi
- 2 ud de Pechuga de pollo de corral
- 2 g de Romero fresco
- 2 g de Tomillo fresco
- 25 g de Dientes de ajo con piel
- 20 g de Aceite de oliva
- 200 g de Cebollitas francesas peladas
- 200 g de Caldo de ave
- 40 ml de Vino blanco
- Sal
- Pimienta
- Sal fina
- Sal en escamas
- Tomillo para decorar
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1.
Salpimenta las pechugas de pollo y macera dentro de un recipiente hermético durante 48 horas, junto con el tomillo, el romero, los ajos aplastados con piel y unos 20 gramos de aceite de oliva, bien mezclado todo. Guarda en la nevera.
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2.
En un cazo, dora levemente las cebollitas a fuego bajo junto con una cucharada de aceite de oliva. Cubre con caldo de ave y cuece tapado durante 25 minutos. Corrige el punto de sal. Retirar las cebollitas y reduce el volumen del jugo de ave a fuego bajo hasta evaporar a 1/3 de su volumen. Reserva.
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3.
Deja las pechugas de pollo fuera de la nevera durante 30 minutos antes de cocinar para que se temple la carne y mételas en el horno sobre una bandeja a 220º C durante 20 minutos.
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4.
Parte los kiwis por la mitad y, con ayuda de un sacabolas, retira su pulpa. A falta de 5 minutos para terminar el asado, rirega con el vino blanco e introduce junto con el pollo, las cebolletas y los kiwis. Cocina el conjunto unos minutos.
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5.
Lamina finamente las pechugas y sirve junto con las cebolletas y los kiwis. Riega con el jugo de ave reducido y añade un poco de tomillo y de sal en escamas.
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