55min
Fácil
Por
¡HOLA! COCINA
Esta sopa de cebolla gratinada es un clásico de la cocina francesa. Reconstituyente, reconfortante y deliciosa, lleva pocos ingredientes y es bastante sencilla de preparar. Las cebollas, las rebanadas de pan y el queso rallado son sus protagonistas.
- 5 ud de Cebolla
- 2 cs de Aceite de oliva virgen
- 2 cs de Mantequilla
- 1.5 l de Caldo de carne
- 1 cc de Harina
- 100 g de Queso rallado Emmental o Gruyère
- 1 chorrito de Brandy o vino blanco
- 8 rebanadas de Pan de baguette
- Sal
- Pimienta
-
1.
Pelamos y picamos en juliana las cebollas.
-
2.
Echamos el aceite y la mantequilla en una cazuela que ponemos al fuego.
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3.
Cuando esté todo derretido y mezclado, añadimos la cebolla y cocinamos a fuego suave con una cuchara de madera.
-
4.
Tenemos que esperar a que la cebolla quede translúcida.
-
5.
Agregamos la harina y damos unas vueltas, es para que la sopa coja cuerpo.
-
6.
Incorporamos el alcohol elegido y dejamos que evapore un par de minutos.
-
7.
Añadimos el caldo de carne y cocinamos a fuego medio durante 20-25 minutos.
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8.
Repartimos la sopa en cuencos resistentes al calor del horno.
-
9.
Tostamos las rebanadas de pan y las colocamos encima de la sopa.
-
10.
Espolvoreamos con abundante queso rallado en cada cuenco.
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11.
Metemos al horno precalentado a 200ºC y gratinamos a 220º durante 5-6 minutos.
-
12.
Servimos la sopa inmediatamente bien calentita.
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