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35min
Fácil
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¡HOLA! COCINA
Aunque el capuchino es un tipo de café que se sirve con espuma y cacao espolvoreado por encima, el concepto lo vemos aplicado a muchas otras elaboraciones tanto dulces como saladas. Aprovechamos si coincide con la temporada de guisantes para preparar este capuchino al que añadimos nata montada y que aromatizamos con nuez moscada. Estupendo para servir como aperitivo e iniciar una comida o una cena con él.
- 500 g de Guisantes frescos
- 80 g de Mantequilla en pomada
- 150 ml de Nata para cocinar 35% M.G.
- 1 manojo de Perejil fresco
- 1 cs de Nuez moscada rallada
- Sal fina
- Pimienta
-
1.
Monta la nata con varillas eléctricas hasta que esté bien firme. Sazona con la mitad de la nuez moscada, sal y pimienta recién molida y reserva en el frigorífico.
-
2.
Desgrana los guisantes y échalos en una cazuela cubiertos de agua con el perejil y una pizca de sal. Cuece 8 minutos.
-
3.
Escurre los guisantes y échalos en el vaso de la batidora con el perejil. Añade la mantequilla y una pizca de sal y de pimienta recién molida y tritura hasta obtener un puré ligeramente espeso. Introdúcelo en una manga pastelera.
-
1.
Reparte el puré de guisantes en vasitos altos alternando con la nata montada. Espolvorea con la nuez moscada restante y sirve.
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