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Las rubias saben lo que cuesta mantener el color perfecto y, aunque si estás acostumbrada a visitar cada mes a tu colorista ya soñarás con las tendencias en mechas que triunfarán este verano, la realidad es que lo que ahora necesitas es un ritual casero con el que sacar el máximo partido a tus reflejos. Los peluqueros profesionales han encontrado maneras de ayudarte a distancia, como el Salón Moncho Moreno, desde donde te preparan un tinte personalizado para enviártelo a casa listo para retocar las raíces. Y es que, los expertos son conscientes de lo útiles que resultan sus consejos en estos momentos y por eso revelan muchos de los tips con los que cuidar el pelo durante estas semanas. Descubre las fórmulas con las que evitar los subtonos naranjas o amarillentos o por qué el violeta es un color salvavidas.
Alíate con el morado
Si eres rubia seguro que ya estás familiarizada con las fórmulas correctoras de color. Sí, esos champús y acondicionadores de un intenso color púrpura que consiguen neutralizar los subtonos amarillentos o anaranjados de tus mechas. Desde L'Oréal Paris explican que "los tonos cálidos son tus enemigos cuando quieres conseguir un tono fresco y claro. Cuanto más oscura es la base, mayor es el reto. ¿La razón? A mayor decoloración, más largo es el proceso y también mayor aparición de tonos amarillos y naranjas". Para combatir esta degradación del rubio, los pigmentos morados que contienen algunos productos te ayudan a conseguirlo, como la gama Elvive Color-Vive Violeta de la marca parisina. Generalmente, con utilizar el champú violeta una vez por semana tras el lavado habitual suele ser suficiente. Déjalo actuar durante entre 5 y 10 minutos, según necesites neutralizar más o menos, y adapta la aplicación según veas que tu color se va volviendo anaranjado.
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Como tratamiento que combine este trabajo de matizado con una hidratación profunda, los productos nutritivos enriquecidos con pigmentos son la solución. Desde la tienda especializada en belleza Claudia di Paolo recomiendan la Mascarilla Color Rubio Puro 'Baby Blond', de Christophe Robin: "Los cabellos rubios tienden a amarillear o a apagarse. Para que esto no ocurra, existe esta mascarilla capilar revitalizadora del color con ingredientes nutritivos como la manteca de almendras y el aceite de Buriti", una fórmula que también ayuda a reducir la porosidad de pelo, una consecuencia muy común de los procesos de decoloración.
Recupera la suavidad
Los expertos de Living Proof aseguran que el color comienza a estropearse desde el mismo momento en el que sales de la peluquería, y señalan a los principales 'culpables' de esta degradación: los rayos del sol (UV), las herramientas de calor como planchas o secadores, y lavarse la melena con agua rica en cobre y hierro. Además, el rubio es un tono que debilita mucho el pelo: "El proceso de coloración a menudo daña la capa protectora exterior del cabello y deja las cutículas levantadas. Esta capa es responsable de darle su tacto suave de manera natural y de protegerlo de la humedad". Para evitarlo, la hidratación profunda es fundamental y también dar con 'fórmulas escudo' contra las agresiones, como su gama sin sulfatos ni siliconas Color Care.
La farmacéutica Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia, coincide con los profesionales de Living Proof sobre lo importante que resulta cuidar el cabello con fórmulas a medida: "Si tu pelo es seco busca productos que aporten nutrición con karité. En los cabellos coloreados es mejor utilizar productos sin sulfatos para evitar que el color se pierda. Si tienes el pelo gris, blanco o rubio platino, elige productos con pigmentos morados. Si tu cabello es fino, evita las siliconas que le dan más peso y lo aplastan".
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Los retoques mínimos
Ten siempre en mente que para conseguir un resultado profesional... tienes que acudir a un salón profesional. Mientras tanto, mantén las raíces perfectas y no te animes con las mechas o los reflejos (aunque resulte tentador). Como avisan desde Maison Eduardo Sánchez hay que "ceñirse a retocar la raíz porque si el resultado no es el desado, será más fácil arreglarlo después en el salón". Como precauciones previas, aplica vaselina en el contorno de la frente, en la nuca, en las orejas y en el cuello para evitar reacciones y proteger la piel. Y a la hora de comprar el color, la máxima de este salón madrileño es elegir siempre un tono más claro que el tuyo: "Porque una vez aplicado, suele ser más oscuro de lo que parecía en la carta de color. Hay que ajustarse al máximo al tono que se tiene en ese momento en raíz y por eso debe elegirse siempre un tono más claro que, generalmente, suele corresponder con un tono numéricamente superior".
Lo que debes evitar
Para todas aquellas que estén ya pensando en retocarse el color desde casa, hay un error muy común que te separará de un resultado perfecto: "Cuando te hagas raíces intenta no tocar el cabello que ya está teñido ya que el “tinte sobre tinte” lo oscurece debido a la sobre-pigmentación", avisan desde My Organics. Además, tiran por tierra un viejo mito que decía que cuánto más sucio está el pelo a la hora de teñirse, mucho mejor: "Esto, unido a si usas productos que contienen siliconas pueden provocar que se forme una capa que evite que se tapen las canas".
Por último, si temes que al teñir tan solo la zona más cercana al cuero cabelludo el resto de la melena quede apagada, los mismos expertos de My Organics tienen un consejo para ti: "Humedece el resto del cabello con un spray con agua y aplica el resto del tinte masajeando la melena. Deja que actúe entre 3-5 minutos, no más. Cuando se aclare hay que continuar con el masaje, de esta manera revitalizaremos el color". El punto y final perfecto a un ritual de mantenimiento con el que vas a estar perfecta hasta tu próxima cita en la peluquería.
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