Cómo cuidar la piel a los 20 años

Hidratación y limpieza, claves para mimar los cutis jóvenes

Por hola.com

El paso del tiempo deja sus huellas de una manera muy clara en la piel. Tanto si hablamos de primeras líneas de expresión como de arrugas, lo cierto es que la buena salud del cutis es una de las mayores preocupaciones de la mayor parte de las mujeres. Pero, según van pasando los años, cada tipo de piel requiere unos cuidados muy concretos y no es lo mismo enfrentarse a los problemas de una piel joven que a los de una piel ya madura. ¿Quiere saber cómo mimar la piel en función de su edad?

La piel a los 20 años

  • Aunque la piel suele encontrarse en uno de sus mejores momentos, lo cierto es que también necesita mimos. La contaminación, las largas noches de fiesta, la falta de descanso o el sol pueden comenzar a hacer mella en el cutis. ¿Cómo? Dejando entrever las primeras líneas finas de expresión y una piel poco luminosa y cansada.
  • Si hablamos en rasgos generales, puede decirse que la prioridad en los cutis jóvenes es la protección solar y la hidratación, o el control de las impurezas en aquellos casos en que haya granitos.
  • A los 20 años es fundamental seguir un riguroso programa de higiene, sobre todo cuando la piel es mixta o grasa. El primer paso es elegir la fórmula limpiadora más adecuada a su tipo de piel. Lo más importante es limpiar el cutis cada noche, incluso si no se maquilla, para así eliminar todo rastro de suciedad y dejar la piel preparada para el tratamiento posterior.
  • La piel se ensucia y aparecen granitos o puntos negros: prohibido tocárselos, pues la piel se irrita y acaba peor de lo que estaba. En su lugar, y sobre todo si tiene la piel grasa, debe usar un jabón para limpiar la piel de todas esas impurezas.
  • Y, tras la limpieza, la hidratación. Si la piel es seca, puede usar cremas untuosas, pero si tiende a ser grasa, los productos oil free serán sus mejores aliados. La mayoría de las firmas tienen productos específicos para las pieles jóvenes. Tampoco estará de más usar una mascarilla limpiadora una vez por semana, especialmente en las áreas donde pueden aparecer impurezas, como es la zona T (frente, nariz y barbilla).
  • Cuando de arrugas se trata, más vale prevenir que curar. Por tanto, no es disparatado comenzar a usar un producto para el contorno de los ojos a partir de los veinte años, especialmente si se fuma, se pasa mucho tiempo ante el ordenador o se suele olvidar de las gafas de sol. A esta edad, es mejor usar un producto de textura gel o muy fluido.
  • Cuidado, además, con sus hábitos, pues una fumadora adicta al bronceado de 25 años puede tener un cutis mucho más castigado que el de una mujer de 45 que no haya probado un solo cigarrillo y haya huido siempre del sol. Es éste uno de los mayores enemigos de la piel, pues podemos sentar las bases de una piel arrugada y con manchas en el futuro.
  • Es un momento perfecto para establecer los hábitos de cuidado facial: si comienzas a utilizar una hidratante y una limpiadora desde bien joven, esa costumbre no se olvidará nunca.