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Supervivientes se ha consolidado como el concurso más extremo de la televisión y una de las partes más destacadas de esta aventura es el contacto constante con la naturaleza, incluso con los riesgos que implica. De hecho, tan solo hace falta echar la vista atrás para recordar como Gianmarco Onestini y Omar Sánchez se retorcían de dolor a causa de la picadura de una araña o cuando Melyssa se aterrorizó al descubrir una serpiente mientras recogía frutos secos. En esta ocasión los "supervivientes" han vuelto a recibir a un inesperado invitado: un tiburón pequeño que se ha acercado hasta la orilla de Cayo Paloma, donde se encuentran esperando la reunificación de los grupos. Totalmente emocionada, la exconcursante de La isla de las tentaciones no daba crédito a lo que estaba presenciando mientras que, con menos entusiasmo, Lara Sajén intentaba convencerla para cazarlo y así comer.
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Melyssa Pinto ha confesado que sus animales preferidos son los tiburones y las serpientes porque, aunque ambos le dan mucho miedo, siente una gran adrenalina cuando los ve. Por eso no es de extrañar que la concursante se haya emocionado tanto al descubrir al escualo tan cerca mientras ella limpiaba el pescado en la orilla, razón por la que el animal se ha aproximado. De hecho, ha dicho que este encuentro en Cayo Paloma ha sido "un momento maravilloso".
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Pero no todos estaban tan impresionados con la inesperada visita del animal, mientras Melyssa no paraba de alertar con ilusión a sus compañeros ante la presencia del tiburón, Lara Sajén sugería la posibilidad de capturarlo para comérselo, después de dudar de que se tratase de dicho animal y ante la mirada escandalizada de la ex de Tom Brusse: "¿Se puede coger eso?", preguntaba Sajén con total naturalidad. "¡No! ¿Estás loca?", exclamó Melyssa intentando proteger al animal a toda costa y argumentando las razones por las que debe estar en libertad. "¿Cómo me he vuelto de 'asalvajada' que estaba por tirarme para cogerlo?", terminaba por reflexionar la bailarina.
La situación ha dado lugar a una divertida conversación entre Melyssa y Lara Sajén, en la que esta última ponía a su compañera en un aprieto al tener que responderle a si accedería a comer tiburón en caso de que estuviera muerta de hambre. "También podría comerte un trocito de tu pierna y no te lo como...", bromeaba la que fuera participante de La isla de las tentaciones que, finalmente y tras asegurar reiteradamente que nadie debería comer tiburón, terminaba por aceptar que en caso de hambre extremo sí se alimentaría con este tipo de animal.
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