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Kiko Matamoros adelgazó más de diez kilos tras pasarse tres semanas en el hospital. El colaborador de Sálvame ingresó para someterse a una intervención en la que debían extirparle la vesícula y, aunque fue dado de alta a las pocas horas, una complicación hizo que tuviera que regresar. De primeras, los médicos creyeron que sufría una pancreatitis, sin embargo, finalmente fue sometido a una pequeña intervención para colocarle un drenaje y acabar los problemas. Mejoró y apenas unas horas después de ser dado de alta, puso rumbo a sus vacaciones en un destino paradisíaco con su novia, Marta, que no se había separado de él en sus más de 20 días de ingreso hospitalario. A su vuelta, el colaborador ha confesado en directo en su programa que debe volver a ser intervenido.
"En principio es un tema menor y el viernes estaré en la calle, a partir de ahí espero que se acabe este calvario porque lo he pasado regular", ha revelado el colaborador desde la puerta del hospital. "No estoy preocupado porque estoy confiado en las manos en las que estoy", ha añadido. Lo que le ha sucedido son cosas que entran dentro de lo normal y ha explicado que aunque la infección le castigó bastante, ya está resuelta. "El problema ahora es que hay una fuga de bilis y tienen que ponerme un catéter interno", ha comentado Kiko a Jorge Javier Vázquez.
Su cambio físico ha sido más que visible porque ha perdido mucho peso, tanto por el cambio de alimentación como por la operación. El colaborador se ha resistido a aparecer ante las cámaras y apenas ha salido en las publicaciones que realiza su novia influencer, aunque ha querido dar explicaciones con una fotografía que ha subido en su perfil en la que se ve su nueva figura. "Nueva realidad", ha escrito junto a la instantánea en la que evidentemente se le ve más delgado, aún con un apósito y ha publicado unos emoticonos sonriendo al lado del texto. "A mí me gustas tengas la realidad que tengas, pero muy pronto estarás a tope de nuevo", ha respondido su pareja rápidamente.
Durante su intervención en directo, Jorge Javier Vázquez le ha dicho que le echa mucho de menos y todos sus compañeros desean que vuelva pronto, pero él ha querido responder algo más. "Ha habido cosas que no me han gustado, entiendo que he tenido reacciones excesivamente bruscas pero ha habido cosas que no entiendo ni creo que vaya a entender nunca, pero tengo ganas de trabajar porque cuando lo he dejado por un tiempo luego lo he echado de menos, soy honesto". Además, ha querido dejar claro a todos sus compañeros que no quiere hablar nada sobre su hija Ana Matamoros: "No voy a hablar nada de ella porque no me interesa".
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