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Ana María Aldón se reencontró con su hija Gema en la final de Supervivientes, pero los espectadores se preguntaron por qué José Ortega Cano no había estado en el resort madrileño donde se han rodado estas últimas semanas del programa. El extorero ha comentado que ha sido un problema de salud lo que le alejó de su mujer. "Yo padezco de sintrom, que se me sube, se me baja... se me puso muy alto, muy descompensado, y me tuvieron que llevar a la Clínica de Sanlúcar de Barrameda", ha contado en Sálvame. "He tenido que estar tratándome el jueves, que no pude ir a la gala, que me hubiera encantado", ha explicado, disgustado por haberse perdido la ocasión y también por su pequeño altibajo sanitario. Sin embargo, ahora se encuentra mejor tras tres o cuatro días medicándose.
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Ortega ha contado que este viernes ya ha podido hablar con su mujer después de que ella marchara al concurso en febrero y se pasara tres meses en la isla. Está muy orgulloso de ella y la ha felicitado una y otra vez, como ha hecho en apariciones televisivas anteriores por su excepcional concurso. Además ha admitido que para él había dos ganadoras, Ana María y Rocío, y por supuesto Jorge, a quien le mandaba su enhorabuena.
"Ana María está superenamorada de mí y yo de ella, tenemos un hijo, y yo creo que tenemos un futuro muy bonito", ha contado Ortega, alegando que su mujer había ido al concurso a redescubrirse a sí misma después de haber pasado unos años de infancia y juventud más difíciles. El maestro también ha contado que está de acuerdo con lo que quiere su esposa y está deseando tener otro hijo con ella.
Antonio David ha explicado que Ana María le desveló en la noche del jueves uno de los motivos por los que se decidió a ir a Supervivientes. Quería demostrar que puede valerse por sí misma y que vive con Ortega Cano desde hace años pero es una mujer independiente y fuerte. "Eso es muy bonito y la engrandece", ha afirmado el diestro. "Yo sabía que el reality le iba a venir bien", ha añadido el que fuera marido de Rocío Jurado, que también ha destacado la tarea del resto de concursantes a la hora de hacernos estos meses de confinamiento más fáciles y amenos. Rafa Mora también ha desvelado que la segunda finalista del concurso ha cambiado de look y se ha puesto el pelo -que tiene rapado a causa de una prueba por la que se llevó tres cocidos- de color platino. A pesar de que todo el mundo le dijo una y otra vez que el corte le quedaba muy bonito, ella se sentía muy fea, quizás este cambio le haga verse mejor. Su esposo sí lo piensa: "Le tiene que ir muy bien el platino".
José Ortega Cano ha hablado también del homenaje que desde Supervivientes han hecho para Rocío Jurado, dándole a su nieta una foto en la que aparecen juntas. "Es una alegría y una satisfacción que la figura de Rocío esté viva. Se ha muerto el cuerpo pero no se ha muerto el sentimiento y el amor que ella tenía por dentro. Entonces... tenemos que recordarla. Cuanto más se la recuerde mejor. He escuchado a Jorge, en alguna ocasión, comentar que la nombramos mucho y yo pienso que es lo más idóneo, que aquellos que se han ido y que han dejado huella de verdad, recordarlos lo más posible", ha explicado. También ha recordado, a petición de Antonio David, el momento en el que 'la más grande' subía a su nieta al escenario a cantar con ella, cuando esta no era más que una niña y que quedó plasmado en la fotografía que le entregó el programa a la concursante.
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