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Hace un mes Ana Matamoros tuvo que ser operada de urgencia después de sufrir un accidente doméstico, pero no era la única mala noticia a la que la familia tendría que enfrentarse. A principios de este mes fallecía su abuela, la madre de su madre Makoke, a los 88 años. "El médico nos autorizó para poder desplazarnos y la última semana pude estar agarrada de su mano", aseguraba la ex de Kiko Matamoros durante su aparición en el programa Viva la vida. Sin embargo, su hija no ha podido estar junto a ella en estos momentos tan difíciles puesto que vive junto a su pareja y no con su familia. En unas declaraciones a la agencia de noticias Gtres, la influencer que está poco a poco recuperando su vida después del confinamiento se mostraba apenada por no poder animar a su madre.
"Pues ahí va, triste, pero bueno", explicaba Ana mientras caminaba de vuelta a su casa después de una cita en un centro estético para hacerse la manicura. La influencer llevaba el pelo suelto y unas llamativas gafas de color rosa que pocas veces muestra en su perfil de Instagram, además de la ya imprescindible mascarilla para salir a la calle, sobre todo como en su caso iba a un lugar cerrado. Por el camino recogía unos croissants de desayuno para las mujeres encargadas de sus uñas, que apreciaban el amable gesto.
- El retoque estético de Ana Matamoros con 18 años
Ana ha estado desvelando en sus redes sociales los motivos por los que tuvo que ser intervenida el mes pasado y también ha compartido que la próxima semana volverá a pasar por el quirófano. Será para corregir la operación de pecho que se hizo cuando tenía 18 años. Tal y como ha compartido, aunque el resultado fue satisfactorio en su momento, después de dos años la situación ha cambiado y ya no está tan contenta. Además, podrá arreglarse la cicatriz que le quedó, que es grande debido a que la herida no se hizo bien.
Ha explicado que el accidente que sufrió con el diente fue lo que le hizo darse cuenta de que esta era la mejor ocasión posible para someterse a una intervención de este tipo y poder hacer el reposo necesario. El hecho de que haya que quedarse en casa y no se puedan hacer planes ni trabajar en muchos casos lo convierte en una situación perfecta para pasar por el quirófano y quitarse de en medio una situación que hacía tiempo que quería abordar. Ana ha desvelado que a los 18 años se hizo una reducción de pecho y se lo "levantó", pero con el tiempo esta corrección física volvió a empeorar y ahora se podrá implantes de pequeño tamaño para intentar evitar que vuelva a pasar.
Ana Matamoros sale desde hace un año con David Salvador, empresario responsable de la cadena de comida hawaiana saludable Tasty Poké. Su relación aguantó el tiempo que la hija de Kiko Matamoros pasó estudiando moda en Milán y actualmente está pasando el tiempo de confinamiento junto a él.
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