Marc Bartra y sus hijos se 'incorporan' a la nueva temporada de 'La casa de papel'

El jugador se ha caracterizado con el mono rojo y la careta de Dalí, seña de identidad de la famosa banda de atracadores

Por Belén Nava M.

Desde el pasado viernes, el confinamiento es algo más ameno para todos los que siguen La casa de papel. La cuarta temporada de esta ficción se ha estrenado en la plataforma Netflix con gran acogida entre sus fans, quienes esperaban con inquietud a conocer el desenlace de sus protagonistas, interpretados por los actores Álvaro Morte, Úrsula Corberó, Alba Flores, Jaime Lorente o Miguel Herrán, entre otros. Los ocho nuevos capítulos le han sabido a poco a Marc Bartra, quien dice que los ha visto en tan solo "dos días". El futbolista se ha quedado con ganas de más y para remediarlo ha decidido convertirse en un miembro más de esta famosa banda de atracadores. Así, se ha metido en el papel poniéndose el mono rojo, la característica careta de Dalí y unas esposas.

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El jugador del Real Betis Balompié no se ha puesto a los órdenes de ‘El profesor’ solo, sino que cuenta con dos aliados para esta nueva aventura: su hija mayor, Gala, y el pequeño de la familia, Max. La niña, de cuatro años, se ha puesto la máscara y ha decidido que su personaje en la ficción se llamará Sevilla, igual que la ciudad en la que viven. Con solo cinco meses, el niño ha posado sobre su padre con una capa roja y el bigote de Dalí pintado. Una simpática imagen que ha hecho las delicias de todos sus seguidores, incluidos dos de los protagonistas de la serie. "Enorme", ha escrito al ver la foto Jaime Lorente -que da vida a Denver- junto a dos corazones y un emoticono de fuego. Por su parte, Esther Acebo -Estocolmo en la ficción- ha puesto palmas y caritas sonrientes con corazones al ver al nuevo miembro de la banda.

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Tiempo para disfrutar en familia

Estos días de parón forzoso están sirviendo a Marc y a su mujer, Melissa Jiménez, para disfrutar de la familia numerosa que han formado sin pensar en los compromisos profesionales que habitualmente forman parte de su rutina. El futbolista y la periodista siguen poniéndose en forma entrenando desde casa, aceptando divertidos retos de sus amigos y, por supuesto, compartiendo juegos con sus pequeños, que son los grandes protagonistas de su hogar. Lo cinco juntos hacen los deberes, practican inglés, ven películas infantiles, pintan... Momentos únicos que hacen que su sonrisa sea constante. "La felicidad de nuestras vidas depende del pensamiento de nuestros días", decía ella.

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Solo un mes después de dar a luz a su tercer hijo, Melissa estaba recuperada y sus seguidores se preguntaban atónitos cómo era posible volver a su cuerpo anterior en tan poco tiempo. El espléndido aspecto de Melissa es el resultado de haber llevado siempre un estilo de vida sano, una alimentación saludable y haber practicado deporte de manera continuada. Ella estaba en plena forma antes del embarazo, y aunque durante el mismo bajara la intensidad de los ejercicios, sus músculos le han ayudado a recuperarse en tiempo récord. Pero además de ser una cuestión de genética, sus dos hijas mayores, también le ayudan a no estar quieta. “No tengo tiempo para para pensar en mi misma, con la dos niñas tan peques, mi casa es un circo” bromeaba la periodista tan solo una semanas antes de la llegada de Max.

Con el nacimiento de Gala, Abril y Max, la pareja ha puesto el broche de oro a su historia de amor, que se hizo pública en mayo de 2014. Fue tres años después, el 18 de junio de 2017, cuando dieron un paso más al convertirse en marido y mujer en una romántica boda celebrada en una finca de Argentona situada a media hora de Barcelona. La familia numerosa reside en Sevilla desde que Marc fichó por el Betis a principios de 2019 tras pasar dos años en Dortmund (Alemania), donde Bartra formó parte del Borussia de la Bundesliga. "Es una ciudad perfecta para criar a tus hijos. Aquí todo es más fácil", aseguró Melissa.

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Melissa Jiménez, peluquera de Marc Bartra en su cambio de 'look' más arriesgado