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Cuando han pasado tres días desde el fallecimiento de Kobe y Gianna Bryant en un trágico accidente de helicóptero en el que murieron otras siete personas, el mundo entero ha fijado la mirada en la viuda del exdeportista. Vanessa se había mantenido en silencio desde entonces, y fuentes cercanas a la familia aseguraban que estaba totalmente destrozada, que le era difícil acabar una frase sin ponerse a llorar. En la noche del miércoles, la que ha sido la mujer del jugador de baloncesto durante veinte años, cambiaba su foto en uno de sus perfiles públicos y le dedicaba este espacio tan personal a las dos personas tan importantes que ahora ha perdido.
- La lucha de Vanessa Bryant por mantener la compostura en estos momentos difíciles
Con este cambio hace ver públicamente su sufrimiento y shock por las muertes de padre e hija con una imagen en la que aparecen sonriéndose el uno al otro. La fotografía se había tomado en 2016 en Toronto, durante un partido de los All Stars de la NBA en el que hizo una de sus últimas apariciones con el título de All Star. Además, Vanessa ha abierto su cuenta a sus seguidores, ya que previamente la tenía privada y solo los que la seguían podían ver el contenido que publicaba.
Así se han podido ver las últimas imágenes que publicó antes del trágico desenlace. En ellas mostraba a su tercera hija, Bianka, jugando por casa con su madre. Aparece probándose sus nuevos botines de Louboutin y "robando" zumo de la nevera a escondidas, para lo que utilizaba una banqueta y así poder llegar a la altura adecuada.
El pasado 19 de enero, Vanessa felicitaba por su 17 cumpleaños a Natalia, su hija mayor, a la que consideraba una representación de todo lo bueno de este mundo. "Eres la niña de 17 años más dulce, respetuosa, hermosa y cariñosa. Estás llena de luz, felicidad y bondad. Gracias por ser tú", escribía la mujer del deportista junto a una serie de imágenes de su infancia.
"Ni siquiera puede terminar una frase sin ponerse a llorar. Pero está esforzándose mucho para no desmoronarse y mantenerse fuerte para sus hijas", aseguraba a People un amigo de la familia. "Nunca puedes prepararte para eso, pese a sus más y sus menos, Vanessa y Kobe eran almas gemelas, ella le consideraba su compañero vital", añadía. Sin embargo, la viuda del exdeportista estará ahora rodeada de todos aquellos que les quieren, tanto a ella y sus hijas, como al fallecido. "Está apoyándose en su fe y tiene un buen círculo de apoyo", revelaba.
Kobe y Vanessa se conocieron en 1999 cuando ella tenía 17 años y trabajaba como modelo figurante en un vídeo musical. Se comprometieron seis meses más tarde y se casaron en 2001, desde entonces tuvieron a sus cuatro hijas Natalia, Gianna -que tenía 13 años-, Bianka de tres y Capri de siete meses.
Raíces latinas, pasión por su familia... así es Vanessa Bryant, el gran apoyo de Kobe desde hace 20 años
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