Sara Carbonero ha vuelto al trabajo de manera triunfal tras el susto vivido la semana pasada, cuando su marido Iker Casillas sufría un ataque al corazón en pleno entrenamiento. De blanco impoluto, con un traje de pantalón firmado por Elisabetta Franchi y top de Calzedonia, la colaboradora de Deportes Cuatro reaparecía en Ibiza, donde se está celebrando el desfile de la firma de ropa de baño, de la que es imagen.
En el hotel Destino Ibiza de la isla pitiusa, tranquilizaba a las decenas de periodistas que han asistido al acto con una amplia sonrisa y palabras de calma. Allí ha confesado que tras el susto inicial y una vez dado el alta, el portero del Oporto se encuentra muy bien, además de destacar lo "buen paciente" que es. "No se queja demasiado; por ahora no está dando nada de guerra. Está bien, tranquilo, relajado, en casa, recibiendo muchas visitas", ha añadido.
El portero aún está "asimilando" lo que sucedió, pero los médicos "le han dicho que va a tener una vida 100% normal". La comunicadora ha declarado que estas situaciones sirven "para relativizar y no enfadarse por tonterías". "Lo peor que podemos hacer en la vida es coger miedo. Es ser consciente de que un día estás aquí y otro día no", recalcaba. Sin embargo, esto no significa que vayan a "viajar o trabajar menos".
Como no podía ser de otra manera, los hijos del matrimonio están siendo parte importante de esta recuperación. "Son una inyección de alegría en estos momentos. Los peques ayudan mucho, a animarte, a sonreír, son un chute de energía", ha revelado Sara, que disfrutaba del desfile de Calzedonia junto a Paula Echevarría, Ariadne Artiles, Pepe Barroso y Yon González.
En estos difíciles días, Sara se ha apoyado en los suyos. "Todos somos más fuertes de lo que pensamos. Pero me he apoyado en muchos amigos y en la familia, como cualquier persona. Y hemos tenido un aluvión de muestras de cariño, de reconocimientos, ha sido como un homenaje en vida", ha subrayado destacando el gesto de su amiga Isabel Jiménez, que viaja a Oporto tras conocer la noticia. "Está completamente loca, pero ella es así. Sabía que si me decía que venía le iba a decir que no porque tiene un bebé muy chiquito, de solo un mes. Así que ni me avisó. Me mandó una foto a cien kilómetros de Oporto. Estaba muy emocionada, siempre viene bien la visita de una amiga para desconectar en el hospital".
Intentando estar el máximo tiempo posible con su familia, Carbonero aterrizaba esta misma mañana en el aeropuerto de la isla, donde coincidía con la actriz de Velvet. Ambas han compartido confidencias a su llegada y, a juzgar por las imágenes en las que se puede ver a la intérprete escuchando con atención a Sara, se ponían al día.
El próximo 20 de mayo el portero cumplirá 38 años, una fecha que este año adquiere mayor significado y que Sara no pasará por alto, ya que a partir de ahora se ha propuesto celebrar "cada latido" del jugador. El matrimonio ha retomado su "bendita normalidad" por los alrededores de su vivienda, una espectacular casa con vistas al océano Atlántico ubicada en la exclusiva zona de Foz do Douro, muy cerca de Matosinhos. Este enclave podría ser el lugar idóneo para la recuperación de Iker, quien hablaba así tras lo ocurrido: "Lo importante es estar aquí. Lo puedo contar, lo podéis ver. No sé lo que será del futuro".
Iker Casillas da las gracias tras volver a casa
