Es habitual confundir el proceso de pedicura con el de esmaltado o aplicación de color. La primera tarea se basa en conseguir unos pies perfectos (también aplicable a las manos) en términos de estética. O, dicho de otra forma, convertirlos en el lienzo en blanco perfecto para que el posterior esmaltado de color quede impoluto. Para ello es necesario emplear una serie de herramientas profesionales que, por suerte, están a tu entera disposición para que ahorres tiempo (y dinero) en acudir al salón. Toma nota de todas y cada una de ellas y luce tus sandalias favoritas de la forma más bonita. 

5 trucos para hacerte la pedicura perfecta en casa

  • Exfolia a conciencia: Como cualquier parte del cuerpo, los pies acumulan pieles muertas que influyen, negativamente, sobre la estética de los mismos. Es por ello que en cualquier salón de pedicura al que acudas, este será el primer paso. Masajea en círculos con cualquier exfoliante corporal y, después, aclara con agua tibia y seca el exceso con una toalla y siempre a toquecitos para no irritar el área. Además, si cuentas con un cepillo que lime las durezas, es el momento de usarlo. 
  • Hidrata la totalidad de los pies: Una vez exfoliados, es el momento de hidratarlos muy bien. Ya sea a partir de una crema corporal o, de forma más intensiva, con una mascarilla de biocelulosa diseñada a tal efecto. Estas suelen tener la forma de un calcetín y son de lo más agradables. 
  • Recorta y da forma a tus uñas: Ahora sí que sí, es hora de prestar atención a la longitud y la forma de tus uñas. Empieza recortando, tanto con tijeras como con un cortauñas, para después darles la forma que más te guste: redondas, cuadradas... tú decides. Para ello, hazte con una lima resistente, ya que las uñas de los pies son mucho más duras que las de la mano. 
  • Aplica una prebase perfeccionadora: Quizá todavía no lo sepas pero el top coat no es el único capaz de prolongar la durabilidad del color. De hecho, la prebase para uñas tiene mucho que ver en esto, ya que consigue que el pigmento se fije bien y permanezca perfecto durante más tiempo. Además, contribuye a alisar la superficie y, de este modo, te será más fácil deslizar el pincel a posteriori. 
  • Siempre dos capas: Lo ideal es que dos capas sean suficientes para que el color resultante sea lo más parecido posible al que promete su envase. Es por eso que deberás aplicar la primera y dejarla secar muy bien para, después, aumentar la cobertura y la intensidad con una segunda, en la misma dirección y retirando el exceso previamente sobre el mismo bote. 

10 productos para hacerse la pedicura en casa

Crema exfoliante: 'Wild Jupiter' de Natura Siberica

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Como ya sabes, un exfoliante corporal resultará adecuado para que puedas deshacerte de cualquier rastro de piel muerta. Y aquí es donde entra uno de los mejor valorados del momento, de la firma Natura Siberica. Con el enebro silvestre como ingrediente principal, este tratamiento no solo acaba con las impurezas, sino que también limpia de manera eficaz, activa la circulación sanguínea y alisa la textura. ¿El resultado? Unos pies perfectos, limpios y muy, muy suaves. Esto se debe a que el enebro también actúa de reparador y hasta presume de tener propiedades curativas para posibles heridas. Además, está mezclado con otras especies silvestres y algas, ricas en vitamina A, B1, B6, B12, C y E. 

Tijeras especiales para pedicura, de Beter

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Una vez tus pies estén exfoliados y tus uñas y cutículas algo más blandas tras pasar por el agua tibia, es hora de darles forma y corregir la longitud. Para ello, apuesta por unas tijeras especiales para pedicura, como estas de Beter. Su grosor es ideal para las uñas de los pies ya que son más gruesas y, sin embargo, sus hojas finas te permitirán trabajar con mayor exactitud y precisión. Según el fabricante, crean cortes rectos y limpios y evitan la formación de uñeros indeseados. Una vez acabes con ellas, ya podrás usar la lima para perfeccionar la silueta a tu estilo. 

Cepillo para limpieza de So Eco

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Si quieres mejorar el rendimiento del exfoliante, puedes hacerlo con un cepillo para pedicura como este, de So Eco. Fabricado en madera ecológica y con cerdas a base de hileras de fibra sintética, es ideal para desalojar cualquier rastro de suciedad restante, garantizando así unos resultados impecables. Puedes aplicarlo en combinación con el exfoliante anterior o, si lo prefieres, con un gel nutritivo que derive en un acabado extrasuave. Incide, especialmente, en zonas como las de los talones, más duras y ásperas y, por lo tanto, más susceptibles de concentrar la suciedad. 

Gel hidratante para pies: 'Unreadin Podos' de Isdin

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Ahora sí que sí, toca hidratar tus pies de la forma más efectiva. ¿Cómo? Con este gel para pies secos y agrietados de la gama Ureadin Podos de Isdin. Se trata de un tratamiento que elimina asperezas, rugosidades y engrosamientos, especialmente, en los talones, pero también en la planta de los pies. Gracias a su contenido en alantoína, pantenol y manteca de karité, repara cualquier grieta, nada estéticas si quieres conseguir la pedicura perfecta. Además, cuenta con propiedades exfoliantes derivadas de su contenido en ácido láctico y en bacillus ferment. Todo ello unido a una textura ligera y muy agradable. 

Empujador de cutículas de Tweezerman

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Con el objetivo de que tus uñas nazcan de forma más rápida, pero también sanas y fuertes, es conveniente tratar la zona de las cutículas. Mientras permanece mojada, utiliza uno de estos empujadores. El que ves en la imagen pertenece a la marca Tweezerman y cuenta con doble punta, por lo que es multifunción. Igualmente indicado para la manicura, el extremo redondeado ha sido diseñado para rodear perfectamente la forma de la uña y, así, empuja las esquinas de más difícil acceso. Según sus propios usuarios, los resultados son "como de experto"

Prebase para uñas: 'Apricot' de Dior

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Por fin llega el momento de divertirse con la parte más amena, la de aplicar color. Pero, antes, no olvides hacerte con una prebase protectora y fortificante como la Apricot de Dior. Con ella, la superficie de la uña se queda perfecta, alisada y lista para que tú luzas el esmalte de la forma más bonita. Su fórmula nutre, alisa y modifica radicalmente la parte superior, de forma que el pigmento se mantenga intacto durante más tiempo. 

Esmalte semipermanente: 'UV Hybrid' de Semilac

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Si bien un esmalte tradicional debería ser suficiente para conseguir unos resultados lo más profesionales posibles, es cierto que con uno semipermanente esto está asegurado. Sin embargo, conviene tener cuidado en su elección, pues muchos de ellos cuentan con químicos agresivos, nada recomendables para la integridad de tus uñas. Cosa que no sucede con cualquiera de los tonos de Semilac. Sus esmaltes no solo duran infinitamente más, sino que también fortalecen, favorecen el crecimiento, endurecen la superficie y actúan de prebase, color y top coat al mismo tiempo. Este tiene un tono rosa súper en tendencia y, sin embargo, lo encuentras en infinidad de tonos más. 

Separador de dedos

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A modo de complemento opcional pero del todo útil, en Amazon encuentras los separadores de dedos a los que que la mayoría de profesionales acuden en sus respectivos salones. Y es que los dedos de los pies tienden a estar juntos y esto puede hacer que el esmalte acabe impreso en uno de ellos y eso solo te dificultará la tarea. Estos que ves aquí están hechos de silicona, por lo que son flexibles y se adaptan a cualquier tamaño. Además, son fáciles de limpiar. 

Cómo conseguir una pedicura perfecta paso a paso

Lo único que tienes que hacer es seguir el orden del listado anterior. En primer lugar, exfolia muy bien los pies al completo, incluyendo tus uñas. Aclara con agua tibia y seca el exceso a toques con una toalla de microfibra. Después, aplica una mascarilla hidratante o, directamente, una crema en gel con las mismas propiedades si no dispones de mucho tiempo. Aprovecha que las uñas y las cutículas están más blandas, así como las durezas, para deshacerte de las mismas y para dar forma con las tijeras y la lima. Una vez esté todo esto listo, ya puedes divertirte con el color, aplicado de manera uniforme sobre una prebase alisadora y perfeccionadora. Prolonga la durabilidad con un top coat, ya sea tradicional o semipermanente