Don Felipe recibe en el Palacio Real las cartas credenciales de seis nuevos embajadores

Tras esta ceremonia, los emisarios de de Luxemburgo, Finlandia, Irlanda, Egipto, Argelia e Indonesia ya pueden representar oficialmente a su país en España

Por B. Moreno

El rey Felipe VI ha recibido este jueves en el Palacio Real de Madrid las cartas credenciales de seis nuevos embajadores. Los de Luxemburgo, Finlandia, Irlanda, Egipto, Argelia e Indonesia. Se trata de un requisito necesario que se lleva a cabo a través de la entrega al monarca de un documento que acredita a un embajador extranjero como representante y máxima autoridad diplomática de otro país en España, por lo que, una vez cumplido el protocolo, podrá representando oficialmente a su país.  La ceremonia de entrega ante el Jefe del Estado, que se celebra en el Palacio Real, se remonta al siglo XVIII y se ha mantenido prácticamente intacta en su desarrollo hasta nuestros días.

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Originariamente, los nuevos embajadores eran trasladados en carrozas de época de Patrimonio Nacional desde el Palacio de Santa Cruz, sede histórica del Ministerio de Exteriores, hasta el Palacio Real, escoltados por el Escuadrón de la Guardia Real a caballo y la Escuadra de Batidores de la Policía Municipal. En esta ocasión, y como ha ocurrido desde el comienzo de la crisis sanitaria provocada por la covid-19, los nuevos emisarios no han podido llegar hasta el Palacio Real en carroza, y lo han hecho en el coche oficial escoltados por la Guardia Real. Al llegar a la Plaza de la Armería del palacio, los nuevos representantes diplomáticos han sido recibidos con los acordes de sus himnos nacionales interpretados por la unidad de música de la Guardia Real.

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Una vez allí, les esperaba un representante de protocolo con el que han accedido al Palacio junto con su comitiva, siempre escoltados por la Guardia Real. Uno a uno han ido ascendiendo por las monumentales escaleras de marmol del palacio camino de la imponente Cámara Oficial con sus magestuosas paredes tapizadas y las cortinas de terciopelo granates y doradas y la espectacular lámpara de cristal que preside desde el techo del salón, donde les esperaba don Felipe. La etiqueta que marca el protocolo es la de vestido largo para las señoras y frac, con corbata y chaleco blanco, uniforme de gala o traje nacional, con condecoraciones, para los caballeros, por lo que el Rey lucía el uniforme de gala del Ejército de Tierra.

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El primero en cumplir con el protocolo ha sido el nuevo embajador de Luxemburgo, Christian Marc Biever, a quien ha seguido la nueva embajadora de Finlandia, Sari Rautio, según han informado desde Zarzuela. Acto seguido ha sido el turno de Yousef Diaeldin Mekkawy, nuevo embajador de Egipto. Tras él ha llegado el momento para los de Argelia, Said Moussi, Indonesia, Muhammad Najib, y Armenia, Sos Avetisyan.

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En este acto el Rey siempre ha estado acompañado por el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, pero José Manuel Albares, no ha podido estar presente esta mañana ya que se encontró en una reunión de ministros europeos en Brest, Francia, en su lugar ha acompañado a Felipe VI por lo que en su representación ha acudido Luis Cuesta, subsecretario del Ministerio. Una vez que le han entregado por separado en la Cámara Oficial del Palacio Real la credencial que formaliza su cargo de embajador en España, don Felipe ha mantenido una breve charla de manera individual en otra sala para intercambiar impresiones sobre las respectivas relaciones bilaterales con sus países de origen.

El acto se ha llevado a cabo cuatro días antes de que los Reyes celebren el próximo lunes la tradicional recepción al cuerpo diplomático acreditado en España. Este año, como ya ocurrió el pasado, contará con un número de invitados reducidos debido a las medidas sanitarias y de aforo impuesto por la pandemia provocada por el coronarivus.