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Hay muchas maneras de componer un ramo de novia. Se puede empezar por algo tan bonito como el significado o el color de las flores, o más complejo, como la temporalidad, la textura y las formas. Se puede simplemente ir a por el acierto seguro, evitando los principales errores del ramo de la novia. Los ramos de flores pueden ser simbólicos, y encerrar secretos de familia, algo que sucede a menudo por ejemplo en las bodas royal: el de la Duquesa de Cambridge incluía en su composición claveles, concretamente una variante de flor que en inglés se conoce como Sweet William ('Dulce Guillermo'), lirios como símbolo de la felicidad, jacintos del amor, o mirto, siendo estas últimas una tradición propia de la Familia Real Británica que se remonta al año 1845.
Lo que se tiene menos presente, aunque ha ido ganando presencia en los últimos años especialmente gracias a las redes sociales, son las paletas de color de temporada, que no responden tanto a las flores de estación como a las modas. Los trend forecasters especializados en flores siguen los mismos dictados que el resto de 'visionaros' capaces de cazar las tendencias al vuelo: qué es lo que más se lleva y por qué, en qué se inspiran las novias de diferentes partes del mundo para coincidir con lo mismo, cómo influyen la decoración y las colecciones de moda en el resto de cosas que nos rodean...
Una paleta de colores muy famosa que se puede extender a las especies de flores que veremos ganar popularidad en los próximos meses es la que publica Pantone todos los años; más concretamente la de primavera, que este año empieza con el omnipresente rosa cuarzo pero también incluye una variedad de melocotón, azulones, amarillo, verde menta, gris lila o café con leche. La apuesta de Colour Marketing Group, una asociación internacional integrada por expertos en diseño de veinte países, se fija por su parte en los colores cálidos con matices de rojo, e incluyen en su gama de favoritos los marrones neutros, además de rosas y morados.
Reuniendo todas estas tendencias, los expertos en flores han sido capaces de definir varias floral trends para este año que se refieren específicamente a los ramos de novia, y que tienen mucho que ver con la manera en que hemos ido decorando los espacios nupciales en los últimos años. Y la que más llama la atención es la de las flores de jardín, o ramos silvestres, que, como suele pasar a menudo con las cosas que parecen muy sencillas (como el efortless chic), llevan detrás muchas horas de trabajo. Ramos desestructurados, que se alejan del bouquet redondito convencional, con muchas texturas y colores complementarios, además de incorporar a menudo la tendencia del 'ramo comestible' con bayas y frutas silvestres entre las ramitas, flores y hojas. Estos son los ramos de novia que solemos ver a menudo ganando likes por miles en Instagram: una composición de grandes dimensiones y flores frescas, que parecen recién cortadas del jardín de casa.
También, dicen desde el Flower Trends Forecast, donde han elaborado una lista de tendencias integrada por casi veinte floristas, se pondrán de moda los colores sorbete, como limones, naranjas y mandarinas, ácidos pero con un punto suave cercano al pastel, resultado de la mezcla con blanco y marfil, además de verdes primaverales intensos y azules, y contrastes en las formas de las flores, con tipos de flor más exóticas o inesperadas superpuestas a las peonías y tulipanes clásicos (recuerda que el tulipán es mejor reservarlo para los meses fríos, así que ésta será una tendencia temprana de primavera). Dos tendencias más que se esperan en los próximos meses: los ramos boho, inspirados en la tendencia global a la artesanía y el DIY, con flores como el girasol, amarillas y muy grandes, las rosas salvajes, margaritas o delphinium; y finalmente los detalles metalizados, como los acabados en rosa achampanado o bronce.
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