Rania volvió a echar mano del caftán tradicional con flores bordadas y golpes de color a contraste, aunque con un ligero cambio en su diseño habitual. En vez de optar por la discreta silueta de cuello caja y mangas largas, la reina de los jordanos ha lucido un caftán veraniego con ligero escote 'v' y mangas amplias francesas. Para realzar su figura, el caftán incluye un fino cinturón rosa. En cuanto a los complementos, Rania se ha mantenido en la misma paleta de colores, con un bolso de mano verde oliva en piel de serpiente y unos salones de tacón a juego, de la firma Jennifer Chamandi.

Son pocas las veces que Rania de Jordania y la princesa Salma coinciden en actos protocolares. Cuando lo hacen, sin embargo, es palpable la complicidad entre ambas. La hija mayor de los reyes comparte con su madre un impresionante parecido físico e incluso se han dejado ver previamente en looks muy similares, siempre de inspiración étnica y local. Es quizá la mayor herencia de estilo que esta habrá obtenido de Rania, cuyo sello impregna la elección de su hija para la celebración del 75 aniversario de la independencia de Jordania.

Los patrones del caftán de Salma corresponden con uno de los últimos diseños que ha llevado Rania. En la imagen, de hace apenas un mes, la vemos con un modelo de mangas largas y bordados en potentes tonalidades, las mismas que adornan la elección de la Princesa el día de hoy. Anteriormente, los caftanes se bordaban en pecho y mangas con diferentes colores y motivos para señalar el rango de su portador o la familia a la que pertenecía, por lo que, siguiendo esta tradición, no parece coincidencia que madre e hija encuentren en el caftán un símbolo de su inquebrantable vínculo.