La Scala de Milán, el teatro de la ópera más importante del mundo, abrió anoche la temporada con un clásico, Madama Butterfly de Giacomo Puccini; un desfile de glamour y una gran ovación, 13 minutos de aplausos. El estreno, que contó con la presencia del rey Juan Carlos como invitado de honor, fue todo un acontecimiento social y aunque se echaron en falta a algunas personalidades del mundo de la política, debido muy probablemente a la crisis de gobierno en Italia, brilló toda una constelación de estrellas.

Madama Butterfly se estrenó en La Scala de Milán en 1904 con mala crítica y mala recepción del público. Giacomo Puccini reescribió entonces varias veces la obra, que finalmente acabó convirtiéndose en un éxito de taquilla, hoy aún más en pieza clave en el repertorio operístico de compañías de todo el mundo. Así que no era de extrañar la expectación que un siglo después había levantado su vuelta al cartel de La Scala de Milán. La primera función iba a retransmitirse por la RAI 1, la cadena de televisión pública italiana.

Como no podía ser de otra forma el rey Juan Carlos se siente muy unido a Italia, no en vano nació en Roma. Pero además mantiene el vínculo con alguna que otra visita desde su abdicación siempre que la agenda se lo permite. Por ejemplo, en estos dos años y medio como segundo de a bordo, ha acompañado a su hijo, el rey Felipe, en un acto en Roma de la Fundación Cotec, que nació gracias a su impulso; ha hecho una discreta visita privada a Venecia, donde asistió a una demostración en directo del arte de vidrio de Murano, y ha hecho escala en Roma en otro viaje con un grupo de amigos.

La actriz italiana Chiara Francini llegó como una gran diva con un vestido de terciopelo de color vino. El generoso escote de pico daba protagonismo a una gargantilla, que hacía juego con los pendientes, a los que el alto recogido años 50 daba también visibilidad

Isabella Borromeo, hermana por parte de padre de Beatrice Borromeo, y su marido, el magnate del petróleo italiano Ugo Brachetti Peretti, no se perdieron esta noche en la ópera. Isabella, imagen de firmas como Emporio Armani o Pomellato y madre de tres hijos, brilló con un cuerpo cuajado de incrustaciones de cristales y una larga falda de terciopelo (el tejido de tendencia de la temporada), que adornaba un lazo XXL

El banquero y exministro italiano Corrado Passera y su mujer, Giovanna Salza, fueron una de las pocas parejas del mundo de la política que se dieron cita anoche en La Scala. Giovanna, segunda esposa del político y madre de sus tres hijos pequeños, vistió para la ocasión un atuendo masculino: una chaqueta blanca con doble solapa, blanca y negra, que combinó con un pantalón recto negro y, a sus pies, unos stilletos a tono. No descuidó ni el más nimio detalle: unas pulseras de azabache en la mano del clutch, forrado de raso, y un adorno de oro y plata para el moño despeinado.

Giuseppe Sala, Alcalde de Milán, a su llegada a La Scala

No faltaron a la gran noche de La Scala el empresario Arturo Artom y su esposa, Alessandra Repini, que recordaba a Gilda con su melena rojiza, su vestido drapeado, sus guantes largos y su bolero de piel. Añadió brillo al plateado atuendo con sandalias y clucht con incrustaciones de cristales.

El televisivo superchef Carlo Cracco llegó acompañado de Rosa Fanti, su segunda esposa y madre de sus dos hijos pequeños, que puso al rojo vivo la noche con un vestido de fiesta de seda. Dio muestra de que su especialidad es la mezcla de estilos con complementos menos formales de color negro como una trenca corta con cuello de piel, unas sandalias con plataforma y un bolso de mano con asa. Preciosas joyas de brillantes, una gargantilla y unos pendientes chandelier, y rouge en los labios ponían el último toque de glamour.

La despampanante Sabina Negri se dio cita en La Scala con un vestido de corte sirena con transparencias

La periodista y presentadora italiana Cristina Parodi brilló con un vestido negro de Armani con incrustaciones y joyas clásicas

El empresario Arturo Artom y su esposa, Alessandra Repini, con Giovanna Salza y unos amigos

La exmodelo y relaciones públicas Laura Morino Teso, protagonista de la vida social de Milán, acudió a su cita con la ópera como otra gran diva del Hollywood dorado. Lució para la ocasión un vestido negro con escote de corazón con remate en gris, a tono con su fular de seda, que enmarcaba un vistoso collar de cristales de tres vueltas con broche de mariposa.

La doctora de medicina estética Dvora Ancona, acompañada en la imagen por Marinella Di Capua, fue una verdadera princesa de la ópera con tiara y todo.

Cristina Parodi no acudió no acudió con su ocupadísimo marido, el periodista y político Giorgio Gori, pero se encontraba igualmente muy bien acompañada por su hermana, la escritora Benedetta Parodi, que lució para la ocasión un vestido negro de encaje con transparencias y un chaleco de piel rojo de Scervino