Según el famoso cuento de hadas de Charles Perrault, Cenicienta debía volver a casa antes de la medianoche porque si no se deshacía el hechizo. En su desesperada huída al tocar las doce, pierde uno de sus zapatos de cristal, que luego le llevaría a reencontrarse con su príncipe azul. Anoche, muchas 'cenicientas' acudieron a la llamada de la diseñadora de zapatos Úrsula Mascaró, que inauguraba local en Madrid.
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Esta prestigiosa creadora ha exportado sus creaciones por todo el mundo. Prueba de ello es que son utilizadas por estrellas como Angelina Jolie, Paris Hilton y Kate Moss. En España, sus pretty ballerinas son usadas por la Princesa de Asturias y por sus hijas, las infantas Leonor y Sofía. Fue este tipo de zapatilla de ballet con la que empezó su abuelo Pedro esta empresa que ahora continúa Úrsula, quien eligió para la ocasión una falda negra y una camisa de lunares.
La diseñadora reunió en su nueva tienda de la capital a muchas caras conocidas, algunas quizá buscando a su propio príncipe azul, otras habiéndolo dejado en casa, pero todas ellas "enamoradas" de sus zapatos. Las actrices Juana Acosta, Ana Fernández, Xenia Tostado o Bárbara Muñoz, las cantantes Sara Vega y Natalia, la actriz y presentadora Arantxa del Sol, que eligió el azul klein para su traje sastre con transparencias de encaje; las diseñadoras Miranda Makaroff y Mayte de la Iglesia, las reporteras Adriana Abenia o Cristina Pedroche o las modelos Verónica Hidalgo y una embarazadísima Priscila de Gustin, que ya está de ocho meses y espera con ilusión la llegada de su hija Teresa, no faltaron a la cita.
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