)
El acelerado ritmo de vida del S.XXI, principalmente en las grandes ciudades, hace que quienes habitan en ellas tengan que adaptar su rutina diaria a los horarios de cada urbe. Precisamente por este motivo cada vez son más las personas que se animan a calentar y cocinar en el microondas, un electrodoméstico cada vez más común en los hogares españoles que es fácil de utilizar, rápida y práctica. Sin embargo, hay quienes piensan que es una opción arriesgada para preparar los platos, pues apuntan que los alimentos pierden sus nutrientes o que los ingredientes no se guisan correctamente.
Todos los procesos de cocinado hacen que los nutrientes disminuyan
Según explica el profesor y director del Ciencia de los Alimentos de la Universidad de Wisconsin-Madison, Scott A. Rankin, a CNN: "Los hornos microondas funcionan como una manera fácil de calentar rápidamente los alimentos. Y dado que cualquier tipo de cocción provoca algunas pérdidas de nutrientes, la mejor forma de analizar el problema es ver hasta qué punto se agotan éstos. (…) Y, en este caso, la forma de calentar del microondas produce una pérdida mínima de nutrientes valiosos en los alimentos". Por tanto, el microondas no es la única forma de cocinado que hace que las comidas disminuyan sus propiedades, también lo hace cocer, freír o cocinar con agua. Es consecuencia del proceso de calentamiento de los diferentes ingredientes, del nivel de temperatura y de la cantidad de líquido empleado. Cuanto mayor sea cada uno de estos valores, mayor será la pérdida de nutrientes.
Los microondas transmiten calor a los alimentos a través de unas ondas energéticas que afectan a las comidas. Se trata de un proceso que también se produce, de forma diferente, con otras maneras de cocinar los platos, en los que las proteínas igualmente se desnaturalizan y, a veces, pierden sus propiedades. Con este aparato los alimentos alcanzan una temperatura de cocción más apropiada, en menos tiempo y de manera uniforme, tal y como apuntó Rankin: "Por lo tanto, el punto en el que todas las partículas del alimento alcanzan la temperatura deseada se logra con poco daño".
La mejor forma de cocinar
En 2009, un artículo publicado en el prestigioso Journal of Food Science expuso que cocinar en el microondas también tenía beneficios. Entre ellos, la capacidad de mantener mejor los niveles de antioxidantes que otras maneras de preparar los alimentos (al horno, hervidos o en olla a presión). En concreto, los ingredientes estudiados fueron ciertas legumbres y verduras: cebollas, judías y espárragos. En referencia a otros tipos de preparación, la que mantiene mejor el valor nutricional de cada componente es la que los guisa al vapor.
Al margen de cómo se vayan a cocinar los alimentos, la Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas y la Asociación para la Promoción del Consumo de Frutas y Hortalizas recomiendan tener varios puntos en cuenta sobre la preparación de las verduras. El primero de ellos es lavar los vegetales enteros antes de cortarlos. También evitar la exposición de estos productos a la luz y el calor innecesario y trocearlos justo antes de su consumo.
)
)
)
)
)
)
)
)
)
