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Fácil
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6 COMENSALES
Bizcocho de avellanas
Disfruta del clásico bollo pero con el añadido del fruto seco molido, que le aporta un sabor delicioso y una textura ligeramente crujiente
Por
SUSANA BATICÓN
Para el desayuno, la merienda e, incluso, para el postre con un poco de helado, nata o chocolate fundido, este bizcocho te resuelve cualquiera de estos momentos. Molemos las avellanas previamente y como endulzante emplearemos miel en lugar de azúcar. En apenas una hora, tendrás listo un bizcocho esponjoso y ligeramente crocante, perfecto para tomar también con un café, un vaso de leche, un batido o tu bebida favorita.
- 50 g de Avellanas
- 50 g de Harina
- 100 g de Miel
- 50 g de Harina de maíz
- 4 ud de Huevo
- 50 g de Mantequilla
- Azúcar glas
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1.
Precalienta el horno a 170º
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2.
Muele las avellanas dejando algún pequeño trocito.
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3.
Derrite la mantequilla en el microondas.
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4.
Bate los yemas hasta blanquear ligeramente e incorpora las avellanas y la mantequilla.
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5.
Añade la harina y la miel y mezcla todo bien.
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6.
Monta las claras de huevo a punto de nieve e incorpora a la mezcla anterior con movimientos envolventes.
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7.
Engrasa y enharina un molde redondo y vuelca con cuidado la masa.
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8.
Hornea durante 40-50 minutos a 170ºC.
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9.
Saca del horno y deja enfriar para desmoldar y servir con azúcar glas.
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