La repostería francesa está llena de delicias: algunas mundialmente populares y otras, como esta receta, más desconocidas. Se trata de unos pastelitos de almendra y mermelada de albaricoque, que son originarios de la región de Aix-en-Provence y que se terminan con un glaseado.
- 250 g de Almendra molida
- 400 g de Azúcar glas
- 100 g de Mermelada de albaricoque
- 1 unidad de Clara de huevo
- 150 g de Azúcar glas
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1.
Echa en una olla las mermeladas, las almendras molidas y 250 gramos de azúcar glas.
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2.
Pon a fuego no muy alto y no dejes de remover durante unos 5-10 minutos hasta que la masa se despegue de las paredes.
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3.
Deja enfriar la masa y estírala con un rodillo sobre una superficie con azúcar glas.
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4.
Corta los pastelitos con un molde ovalado y ve colocándolos en una bandeja de horno con papel o silicona.
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5.
Amasa los recortes, vuelve a estirar y corta más 'calissons' hasta acabar con la masa.
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6.
Mezcla el resto del azúcar glas con la clara de huevo en un bol.
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7.
Pinta con la glasa la superficie de los pastelitos y deja que reposen 10 minutos.
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8.
Precalienta el horno a 150 grados y cuando esté caliente, apaga, mete los 'calissons' y déjalos dentro durante unos 5 minutos.
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9.
Sácalos, deja enfriar del todo ¡y ya están listos!
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