Comerse Cádiz en 3 días: ruta gastro por los lugares imprescindibles

Hotel Olom

Si hay que elegir un sitio único en Cádiz para alojarte, te aseguramos que la mejor opción es el Hotel Olom. Ya no solo por su privilegiada ubicación, ¡frente a la Catedral de Cádiz! Que es un plus pues el centro centro y el mejor punto de partida para ir a cualquier lugar de esta maravilla de ciudad. Nos fascina la filosofía de este hotel boutique, en el que casi casi puedes detener el tiempo, con sus 14 acogedoras y comodísimas habitaciones, decoradas con arte local -cada una de un artista diferente, la tecnología más actual- y ese único toque vintage gracias a detalles como el tocadiscos para 'pinchar' los vinilos de los estilos más diferentes a disposición de los clientes. La amabilidad y cercanía de todo el personal hacen que te sientas como en casa.

Te fascinará su rooftop, en el que además de unas vistas fascinantes, alberga una delicia de piscina y el espacio Aleph con una increíble propuesta de coctelería de autor a cargo de la bartender Susana Gordillo -alucinarás con su creaciones, muchas de ellas con ingredientes de proximidad -como el Palo Cortado Sour o el Colorao, con manteca colorá y chicharrones- y elaboradas con las últimas técnicas culinarias aplicadas a la mixología- y una gastronomía casual. Sin olvidar la terraza Momento, en la planta baja del hotel, pensada para el desayuno, brunch, lunch o meriendas. 

Y te rendirás ante los desayunos de este hotel que incluye café o té, deliciosos zumos naturales de frutas y verduras, diferentes tipos de pan con mantequilla, aceite de oliva virgen extra, zurrapa de lomo o de atún, aguacate, jamón y queso... Y como platos principales tortilla francesa o de patata, huevos revueltos, fritos con beicon, benedictinos de chicharrones o al pesto, y chilaquiles -un guiño a la propiedad del hotel que es mexicana-. Además, brioche de salmón y salsa nórdica, yogur, fruta y granola casera, bikini de nutella, tortitas con beicon, huevo y sirope de arce o con arándanos, nutella y fresa.

Más información:
Hotel Olom
Pl. Catedral, 9

Restaurante Ettu 

© @ettu.restaurante

El restaurante Ettu, -que significa 'tiempo' en fenicio'- tiene un altísimo nivel gastronómico, y, de la mano de Álvaro Vela que es su chef ejecutivo, propone una cocina de territorio basada en el producto y los productores gaditanos y en la fusión de la tradición y la vanguardia, con guiños a la gastronomía mexicana -por el origen de los propietarios- y fenicia. Un apartado sobresaliente es la increíble oferta de vinos que gestionar la jefa de sala y sumiller Viviana Vilches, una auténtica enciclopedia vinícola. Desde que te sientas a la mesa, te reciben con una especie de ánforas con agua y unos deliciosos panes de masa madre acompañados con sabrosísimas mantequillas, toda una declaración de intenciones. Puedes comer a la carta, pero lo ideal es probar el menú degustación -que cambia cada cierto tiempo- y dejarse llevar en el maridaje por Viviana y sus vinos absolutamente únicos, muchos de la zona pero no exclusivamente. Entre los platos que Álvaro prepara están el fresquísimo gazpacho verde de jalapeños con pepino encurtido y 'falso atún', el espectacular carabinero de Huelva con aguachile de coco y cilantro, su versión del vitello tonnato con chicharrones y mayonesa de atún de almadraba o la alcachofa confitada y a la brasa con crema de queso payoyo.

Más información:
Restaurante Ettu
Pl. Catedral, 9

Restaurante El Faro

Ubicado en el barrio de la Viña, es un referente de la gastronomía local en Cádiz. 57 años avalan la trayectoria de El Faro, hoy al cargo de la tercera generación familiar. Resguardado por los Castillos de Santa Catalina y San Sebastián y bañado por las aguas de la playa de La Caleta, es un auténtico clásico de la ciudad. Tanto en su barra, como en sus mesas altas o en sus salones, lo que aquí hay que comer aquí son sus famosas tortillitas de camarones, crujientes y ligeras, el tomate gaditano con aliño de temporada, la caña de presa ibérica de bellota curada, embutida y aliñada, las papas aliñás con melva, el erizo de mar relleno con tartar de gambón y una crema de sus huevas, la lubina marinada con ostras de Cádiz  o el rabo de toro guisado con patatitas fritas al momento.

Más información:
Restaurante El Faro
C. San Félix, 9

Café Royalty

Considerado como 'el único café romántico de Andalucía', es una visita obligada por la espectacularidad de sus instalaciones y decoración con exquisita carpintería artesanal y escayolas originales recubiertas de pan de oro fino, junto al mobiliario de las primeras décadas del siglo XX. Fundado en 1912 por el empresario Gómez Doreé, homenajea a la burguesía gaditana de finales del siglo XIX, fue centro de reunión de políticos, intelectuales, escritores y artistas, y ha sido escenario de varias grabaciones de películas y series. Café Royalty, en pleno casco histórico de Cádiz y hoy propiedad de la familia Serna Martín, alberga obras de arte de reconocidos pintores como Felipe Abarzuza, el mismo que pintó el techo del Gran Teatro Falla, y aquí Manuel de Falla deleitaba en la época a los clientes con sus conciertos. Entrar en este establecimiento es hacer un auténtico viaje histórico. Funciona como cafetería y restaurante, donde comer desde el desayuno hasta la cena pasando por el aperitivo, el almuerzo y la cena. Su carta es de corte clásico y son famosos sus tartas caseras y sus picatostes, además de aperitivos como las ostras rizadas, las croquetas de aguacate y salmón, el cazón en adobo o la ensalada de langostinos y melva  y platos fuertes como el tataki de atún rojo de almadraba, el pargo a la plancha con arroz de puntillitas o el solomillo de retinto a la plancha, entre otros.

Más información:
Restaurante Café Royalty
Pl. Candelaria, s/n

De tapas por Cádiz

La cultura del tapeo está presente en todo el país, pero en el sur hacen de ella casi una religión. Y en Cádiz hay muchos locales que hacen de las tapas su buque insignia. Las mejores zonas para ir de tapas son el barrio de La Viña, los alrededores del Mercado Municipal -y también su interior-, la plaza de la Candelaria y las proximidades del Mentidero y la Plaza de España. Hay propuestas tanto tradicionales como creativas y más vanguardistas. La lista de sugerencias es interminable, pero no fallarás en Bar El Laurel con sus carrilladas, pavías, ensaladilla rusa, berenjena rellena o papas con choco. En Bar Nono también acertarás si pides salmorejo, pescado frito, lomo en manteca colorá o pechuga Villeroy. No dejes de ir a La Tabernita -que solo abre de jueves a domingo-, para tomar vinos de Jerez o cócteles y acompañarlos con las croquetas de puchero, las albóndigas de chocos en su tinta, los montaditos o las bolitas de bacalao. Y, si buscas algo más innovador, sin perder de vista la tradición, está La Oveja Negra, con vistas a la playa de Santa María del Mar, y tapas como las tortas de Inés Rosales con sardinas, anchoas o salmón, los molletes, las ensaladas, las pavías de merluza con mayo de chile chipotle o las croquetas de secreto y miel.

Más información:
El Laurel C. Obispo de Urquinaona, 3
Nono. C. Valverde, 13
La Tabernita. C. Virgen de la Palma, 32
La Oveja Negra. Av. Acalde Manuel de la Pinta, 11

El Mercado Central de Cádiz

Una parada obligatoria tanto si te gusta comer como si disfrutas cocinando es el Mercado de Cádiz. Su primera piedra se colocó en el años 1837, fue construido sobre lo que fue el Convento de los Descalzos, ha experimentado varias reformas y conserva sus paradas donde comprar los mejores productos frescos (pescados y mariscos de la zona carnes, frutas, verduras, mieles, chacinas, quesos, etc), a las que se suma su espacio gastronómico, con sabores andaluces, españoles e internacionales y uno de los principales puntos de encuentro de gaditanos y visitantes en la ciudad. Hay freidurías, lugares para comer sushi, tacos o especialidades de la cocina belga, locales para degustar los mejores embutidos y chacinas o mariscos recién cocidos y, por supuesto, negocios con los productos y elaboraciones más típicos de Cádiz.

Más información:
Mercado Central de Abastos
Pl. de la Libertad, s/n

Un paseo por la ciudad de Cádiz

Cádiz es una ciudad perfecta para pasear y disfrutar de todos sus encantos: restaurantes, bares, monumentos, playas, jardines. Sus calles invitan a perderse por ellas y sus preciosos rincones. Haz una inmersión a pie por su Casco Antiguo, lleno de plazas pintorescas, iglesias y callejuelas estrechas, sin dejar de visitar su Catedral, en pleno centro, de estilo barroco y neoclásico. Las Plazas de San Juan de Dios

Caminar por el Casco Antiguo te transporta a otra época, con plazas pintorescas, iglesias históricas y callejuelas estrechas que cuentan historias de siglos pasados. La Plaza de San Juan de Dios y la Plaza de Mina son lugares ideales para hacer una parada y admirar la arquitectura gaditana mientras disfrutas de un café o de cualquier otra bebida.

Además, el paseo marítimo ofrece vistas espectaculares del Atlántico, especialmente al atardecer, cuando el sol tiñe el cielo de tonos dorados sobre la Playa de La Caleta, uno de los rincones más icónicos de la ciudad. También puedes recorrer la Avenida Campo del Sur, conocida como la "pequeña Habana" por su parecido con el Malecón de Cuba y recorrer el delicioso Parque Genovés, que tiene una extensión de 30.000 metros cuadrados y es un auténtico oasis. Alberga parterres, palmeras datileras, cipreses... en total unas 150 especies distintas de árboles, palmeras y arbustos, la mayoría exóticas procedentes de otros continentes que gracias al excepcional “microclima” de la ciudad de Cádiz, se han adaptado a la perfección.

Flamenco y Copas

El flamenco es parte de la identidad gaditana. Nombrado en noviembre de 2010 como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, esta expresión artística nació de la fusión entre las diversas culturas asentadas en España -árabes, judíos, gitanos y andaluces-, y especialmente en Andalucía. En Cádiz no puedes dejar de disfrutar de este arte, en el que se mezclan cante y baile y uno de los sitios míticos para vivirlo de cerca es la Peña Flamenca Juanito Villar, donde además de poder contemplar en vivo espectáculos flamencos, se puede comer, beber y tapear. 

Y si quieres completar la ruta con algún lugar para tomarte una copa, nos encantó, sobre todo para el tardeo, El Viajero del Merkao, muy próximo al Mercado Central, con todo tipo de cócteles y combinados, y alguna que otra cosita para comer, atendido por camareros encantadores. Al que añadimos dos de los locales más destacados de la vida nocturna de la tacita de plato como es Muelle Uno, abierto desde las 11 hasta las 3 de la mañana, para beber, comer y relajarse en su terraza, y la discoteca Momart Teatre, para degustar buenos tragos, escuchar música en directo y bailar hasta altas horas de la madrugada.

Más información:
Peña Flamenca Juanito Villar. Pº Fernando Quiñones, s/n
El Viajero del Merkao. C. Libertad, 15
Muelle Uno. Av. Cuatro de Diciembre de 1977, 31
La Posada de Babilonia. Paseo Almirante Pascual Pery, 25