Practicar deporte, ¡con mucho ojo!

Está aumentando el número de lesiones oculares debido a la práctica de determinados deportes sin protección

Por hola.com

¿Sabías que el incremento de la práctica de algunos deportes está incrementando las lesiones en los ojos? Así se ha constatado en el congreso anual de la Sociedad Española de Oftalmología, que acaba de celebrarse. Y es que, sobre todo en deportes con un alto riesgo de impacto, como el squash y el baloncesto, hay que extremar las precauciones para evitar problemas más graves. Así, se calcula que unas 72.000 personas sufren traumatismos oculares cada año, de los que una cuarta parte se deben al deporte. En los niños, el deporte o el ejercicio suponen casi la mitad de los mismos. Una correcta información y protección adecuada evitarían el 90 % de las lesiones.

¿Qué los causa? La mayoría de los traumatismos son debidos a una pelota o a un palo, advierte el doctor Pedro Fernández de la Fuente, presidente de la sociedad.

Un cuidado especial. Los deportes con más riesgo son el frontón, el baloncesto, el squash, el béisbol, el hockey y las artes marciales, para los que los oftalmólogos recomiendan protección con gafas de policarbonato o cascos con rejilla, según el caso. ¿Y en el ‘deporte rey’? El fútbol es el deporte con más lesiones oculares, según este experto, debido a su uso extendido, aunque su riesgo es moderado. Según diversos estudios, un jugador de fútbol tiene una probabilidad de 50 de sufrir una lesión ocular en una carrera de 8 años. El baloncesto es la principal causa de lesiones oculares deportivas entre los 15 y los 24 años en Estados Unidos. Cada año se producen en la NBA aproximadamente 50 lesiones oculares de gravedad. Mientras, el deporte de raqueta más peligroso de todos es el squash, pues una pelota puede llegar a desplazarse a 230 km por hora. Por eso la gravedad de las lesiones en los deportes que utilizan pelotas pequeñas a gran velocidad es también mayor. El 10% son permanentes y en todas se requiere intervención hospitalaria, destaca el doctor De la Fuente.

La experiencia y la protección, claves. La profesionalidad influye en el riesgo de impacto, “no tanto porque los profesionales se protejan más sino porque saben cómo evitar el riesgo, apartándose de la trayectoria de la pelota”, comenta este especialista. De hecho, se ha visto que más del 50% de las lesiones se producen en novatos frente a un 13% en los jugadores avanzados.
Además, la incorporación de protección adecuada en el reglamento evitaría muchas lesiones, aseguran los oftalmólogos. Un estudio realizado en Canadá reveló que antes de instaurar las actuales medidas de protección que tienen que seguir los jugadores de hockey sobre hielo, 70% de los jugadores de este deporte había sufrido algún traumatismo ocular severo y 15% de ellos había derivado en pérdida de visión.

El sol también puede perjudicar. Otro de los peligros de la práctica deportiva para los ojos es la exposición prolongada a los rayos ultravioleta, comenta el profesor De la Fuente. Estas lesiones son más comunes en deportes tales como esquí en la nieve, esquí acuático y otros deportes acuáticos. Entre los síntomas figuran dolor, fotosensibilidad, enrojecimiento y sensación de cuerpo extraño. Los oftalmólogos recomiendan utilizar gafas adecuadas a cada deporte, realizar revisiones periódicas de la vista y extremar las precauciones en el caso de personas con defectos de refracción o que hayan sido operadas recientemente.