'Hermanos': La trágica muerte de Doruk tras descubrir el secreto de Melisa que lo cambiará todo

En este primer capítulo de la cuarta temporada, nada volverá a ser como antes

Por B. Moreno

La tercera temporada de Hermanos acababa dejándonos con el corazón encogido tras presenciar cómo Ahmet, Suzan, Ömer, Süsen, Asiye, Doruk y Sarp sufrían un terrible accidente en la furgoneta nupcial de los padres del joven Eren, después de que Şevval mandara manipular los frenos. Los vimos inmóviles y ensangrentados y no sabíamos qué iba a ser de ellos, ni si sobrevivirían. Si eso te pareció poco, no te pierdas ni un segundo del primer capítulo de la cuarta temporada porque viene marcado por una gran tragedia que lo cambiará todo. 

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Días después del accidente ya nada es igual para los Yilmaz. Ömer, Sarp y Yasmin están más unidos que nunca tras la muerte de su padre, que no consiguió sobrevivir al fuerte impacto que sufría al caer el vehículo al vacío, mientras que Şevval se ha salido con la suya ya que ha logrado evitar que Suzan ocupe su lugar y la ha alejado de su amado para siempre. Además, como madre de dos de los hijos del fallecido, ahora gestiona todo el patrimonio de su exmarido.

Poco a poco, el resto de los ocupantes del coche se van recuperando de las heridas causadas en el accidente mientras Akif, una vez más, tiene un nuevo secreto que guardar al verse implicado sin querer en esta nueva tragedia. Aún así, al empresario no le supone un grave problema ya que continúa avanzando con sus negocios y, tras casarse nuevamente con Nebahat, ha comprado una casa en la que vivirán junto a ellos Doruk, Bahar y Tolga, siendo de nuevo una gran familia. 

Sin embargo, guardar silencio no será un camino de rosas para el empresario, ya que las sospechas sobre él comienzan a levantarse cuando todos se preguntan el motivo por el que se encontraba presente en el momento del accidente junto a los demás si no había sido invitado a la boda.

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El éxito peligra...

Todo marcha viento en popa para Orhan y Şengül, quienes están triunfando con su programa de cocina en la televisión. Sin embargo, las prácticas ilícitas de la tía de los Eren aprovechándose de su fama, no tardarán en pasarles factura. 

Una celebración, una nueva situación y un deseo

Llega el día del cumpleaños de Doruk y Asiye, junto con Nebahat, Akif y todos sus amigos, empieza a organizar una fiesta para darle una gran sorpresa. Los chicos vuelven al colegio tras el accidente y comprueban cómo ha cambiado la relación entre ellos. El buen rollo impera y esperan que sea una situación que perdure en el tiempo. Llama especialmente la atención el vínculo que han desarrollado Sarp y Ömer, quienes, por fin, y tras muchos desencuentros, se tratan como hermanos. 

Afectados todavía por el trágico suceso que tuvo lugar en la boda de Ahmet y Suzan, Berk y Doruk piensan en lo que les gustaría que sucediera si murieran de manera repentina, una conversación que disgusta mucho a Asiye y Aybike.

Un nuevo enfrentamiento

La madre de Sarp y Yasmin organiza una reunión en el colegio para postularse como nueva gestora del centro puesto que la herencia de Ahmet será para sus hijos y, por lo tanto, también para ella. Pero sus planes no saldrán como se propone ya que Şengül rompe una lanza en favor Ömer haciendo valer también sus derechos como hijo del empresario.

Tras no salirse con la suya, Şevval logra enturbiar la situación y hace creer a Sarp que su hermano solo busca el dinero de su padre. Esto hará que se reinvierta su relación y los jovenes vuelvan al punto de partida. 

Un cambio radical

Elif siente que los chicos no se fijan en ella y se sincera con Ayla. La madre de Berk la invita a vestirse de otro modo para conseguir impresionarlos. La joven sigue su consejo y pronto se da cuenta de que, con su nuevo estilo, comienza a conquistar corazones.

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El accidente ha marcado en todos un antes y un después. Akif reúne a todos en su casa con la intención de intensificar sus lazos y estar unidos pase lo que pase. Como era de esperar, Şevval, Yasmin y Sarp no asisten al evento, lo que vuelve a alejarles de todos los demás. 

La relación de Ömer y su hermano se recrudece de tal manera que el joven Yilmaz le acaba revelando el gran secreto que oculta Süsen: cómo se produjo la muerte de Kadir y quién fue la culpable. El muchacho no es capaz de procesar una información tan desgarradora y le pide explicaciones a su novia. La joven no puede seguir callando y, tras presenciar un durísimo enfrentamiento entre los dos hermanos en el que chico Eren coge fuertemente del cuello a Sarp, reconoce lo sucedido y la verdad acaba saliendo a la luz. 

La rabia inunda a Ömer. El joven es incapaz de creer que tantas personas conocieran lo que había sucedido y que hayan sido capaces de ocultarle algo así. Al ver el estado en el que se encuentra, Tolga habla con Asiye, quien se preocupa por su hermano. Lo llama por teléfono y este no tarda en compartir con ella el terrible secreto que acaba de descubrir. La chica será la encargada de transmitírselo a su novio, quien al escucharlo, incrédulo, no puede contener las lágrimas.

Una amarga fiesta

Akif y Nebahat están ultimando los detalles de la fiesta sorpresa de Doruk, cuando aparece Ömer fuera de sí. El empresario y su esposa tratan de calmarlo porque, aunque Melisa perdiera la cabeza y, de algún modo esté pagando por lo que sucedió con Kadir, el joven no está dispuesto a quedarse de brazos cruzados y quiere ir a la policía para denunciarlos también a ellos. El chico está destrozado, pero se rompe definitivamente,cuando llega a casa y descubre que sus tíos conocían la verdad y también se la habían estado ocultando. 

El terrible desenlace 

Nebahat está totalmente hundido por las consecuencias a las tendrá que enfrentarse su hija Melisa, ahora que todo se ha destapado. Pero lo peor está por llegar, cuando Doruk descubre que su hermana es la responsable de la muerte del mayor de los Eren y que sus padres se lo han estado ocultando durante tanto tiempo, no es capaz de asimilarlo. Desconsolado llama a su padre, quien le confirma que las palabras de Ömer son ciertas. 

El jovenno puede soportarlo y huye destrozado y sin rumbo en su vehículo. Mientras conduce, habla por teléfono con su progenitor reprochándole sus actos, desesperado y roto en llanto. La mala suerte hace que una mujer con un niño se le cruce en el camino y, aunque consigue girar el volante y esquivarles, su coche da varias vueltas de campana.

El joven es trasladado al hospital. Allí, mientras está inconsciente, pasan por su mente muchos momentos de su vida y entre ellos recuerda su historia de amor con Asiye. Por desgracia, los médicos no logran salvarle la vida y comunican a sus padres las peor de las noticias: Doruk ha muerto. 

La más triste de las despedidas

Nebahat recrimina a Akif que todo ha sido por su culpa. El afán del empresario por proteger a Melisa ha costado demasiadas vidas, incluyendo la de la su propio hijo. Mientras, Asiye logra colarse en urgencias y ve el cuerpo sin vida de su amado. Los gritos de desesperación y los llantos desgarrados de la joven al ver que su novio ha fallecido logran atravesar el corazón de todos. 

En el entierro están devastados. El dolor es inaguantable para los seres queridos del muchacho: sus padres apenas tienen fuerzas para mantenerse en pie y Asiye, que casi pierde el conocimiento a causa del shock, ni siquiera puede asistir ya que la dejan ingresada.

Tras el sepelio, Akif no es capaz de sobrellevar el dolor y la culpa. El dueño del club considera que ha llegado el momento de pagar por sus pecados: coge un arma de la caja fuerte y se marcha al cementerio con la idea de quitarse la vida junto a la tumba de su hijo. En ese momento llega Asiye, que se ha escapado del hospital para despedirse para siempre de su pareja, y horrorizada presencia la escena. El padre de su novio la insta a marcharse dispuesto a suicidarse. Cuando aprieta el gatillo, un chico le empuja y la bala impacta finalmente en su brazo.