Se casaron el 31 de marzo de 1996

La emoción de los novios, la felicidad de Rocío Jurado, la fiesta... se cumplen 25 años de la boda de Rocío Carrasco y Antonio David

Se dieron el 'sí, quiero' en la finca Yerbabuena, dos años después de conocerse y sabiendo que pronto iban a ser padres por primera vez

Por hola.com

Se cumplen 25 años de la boda de Rocío Carrasco y Antonio David Flores, de la que fue testigo la revista ¡HOLA!. La hija de Rocío Jurado y el entonces guardia se dieron el 'sí, quiero' el 31 de marzo de 1996, que era Domingo de Ramos, en la ermita de las Vírgenes de la dehesa Yerbabuena, propiedad de José Ortega Cano. La ceremonia religiosa empezó a las 14:20 horas y fue oficiada por don Jesús Haro, uno de los sacerdotes que un año antes, el 17 de febrero de 1995, casó a Rocío Jurado y Ortega Cano. La ermita estaba abarrotada de gente en su interior y rodeada por mas de 500 invitados que siguieron la ceremonia por megafonía. Aquel día, Rocío Carrasco era una novia feliz y Rocío Jurado, con un traje fucsia de Victorio & Lucchino, estaba pletórica. "Hoy soy todo: la madre de la novia, la suegra, la futura abuela, la mujer de Ortega Cano, la exmujer del padre de mi hija, la Jurado... y la anfitriona. ¿Qué más?", dijo. "Soy feliz porque mi hija también es feliz", añadió. 

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Rocío, que estaba embarazada de tres meses, llegó a la ermita en un coche de caballos junto a su padre y padrino, Pedro Carrasco, mientras los tamborileros de la hermananda de matriz de  Almonte entonaron ¿Por qué te llamas Rocío? La novia llevaba un vestido confeccionado por el modista Antonio Ardón y se puso en manos del peluquero Ruphert y el maquillador Osvaldo Salvaresa. Su estilismo fue muy comentado y ahora, 25 años después, la propia Rocío ha hablado de ello en el documental sobre su vida. "Me pusieran aquel manojo de pelos de las indias de no sé dónde que se le ocurrió a Rupert… fue muy criticado el 'look'. Luego yo viéndolo a lo mejor me hubiese sobrado algo… el vestido, que todo el mundo ha criticado mucho, lo diseñé yo, lo que pasa es que el vestido iba con escote halter, solo cuello y sin hombros, pero ahí la Jurado dijo que no partía peras y que yo no entraba a una iglesia a casarme con los brazos descubiertos", contó entre risas. 

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Antonio David, por su parte, también llegó a la ermita en un coche de caballos junto a su madre y madrina, Luisa Carrasco. "Estoy muy contento, pero muy nervioso", admitió. Durante la ceremonia litúrgica, Los Marismeños cantaron la Misa Rociera y Rocío Jurado no pudo contener las lágrimas de emoción. 

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Una vez convertidos en marido y mujer, los recién casados posaron a las puertas del templo junto a sus padres para asistir al banquete, en el que se sirvió lomo de merluza de anzuelo a la yerbabuena, pechuga de faisán real en plumaje con salsa de estragón y tarta nupcial. Después, los novios se cambiaron de trajes y disfrutaron de la fiesta junto a sus invitados, entre los que se encontraban Sebastián Palomo Linares, Remedios Cervantes, Raquel Revuelta, Juncal Rivero, María Teresa Campos, Jesús Gil y Gil, Julio Aparicio o Victoriano Valencia. 

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Rocío Carrasco y Antonio David Flores se casaron dos años después de conocerse y tras anunciar a sus respectivas familias que iban a ser padres. "Se decidió que nos casábamos en la Yerbabuena, en la capilla de las Vírgenes, que es donde se casó mi madre con José. Se organizó entre mi tío Amador, mi tía Gloria y mi madre… cuando me casé estaba embarazada de tres meses o tres meses y medio, creo… La boda no fue una imposición, fue una guía, un toreo… Era mi deseo, no diré que no quisiera casarme, pero era el deseo de mis padres y de los suyos, al final era como normalizar algo que se tenía que hacer", reconoció Rocío en su documental.

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La pareja rompió en 1999 y dos años después, llegó el divorcio. En 2007, tras una larga batalla, el Tribunal de la Rota confirmó la nulidad eclesiástica del matrimonio y, según ha contado Rocío, no tiene ningún recuerdo de su boda con Antonio David. "No tengo ni fotos, ni alianza, porque la tiré por el váter y tiré de la cisterna. Y se la llevó el agua. No tengo absolutamente nada. No quiero tener nada que ver con esta persona o con este ser", aseguró. 

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