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Bea Retamal y Elena Rodríguez han sido las heroínas de Supervivientes gracias al generoso gesto que tuvieron con sus compañeros. El grupo de los siervos debía nombrar a los miembros del equipo que, en su opinión, eran los más débiles. De ellos, los dos que obtuvieran la mayoría de votos tenían como misión vencer a la tentación, según las directrices dadas por el Pirata Morgan. Bea y Elena fueron las elegidas por unanimidad para la prueba, que terminó en un mar de lágrimas. La primera se ofreció voluntaria, aunque el grupo la consideraba la más debil junto con la madre de Adara, que mostró su malestar por la decisión del resto de supervivientes.
Aunque la elección fue clara, no estuvo exenta de polémica gracias a la intervención de Pavón. El torero le dejaba claro a la exgran hermana que si caía en la tentación era "muy mala persona". Un comentario que se topó con la rápida respuesta de la damnificada: "Bienqueda, tú no te lo comes por lo que pueda pensar el público". Y prosiguió enfadada: "Tú qué vas a pensar en tus compañeros si no aguantas a nadie". Tras este intercambio de impresiones, las dos elegidas realizaron el camino hasta llegar al Pirata. El reto no era otro que caer en la tentación disfrutando de una recompensa para ellas dos o volver a la playa con un premio para sus compañeros. Mientras que su incentivo llegaba en forma de tortilla de patatas, la opción para sus compañeros eran tres mazorcas de maíz.
Después de leer el pergamino donde se les explicaba en qué consistía el desafío, las dos supieron lo que iban a hacer. Con lágrimas en los ojos, la madre de Adara Molinero era la primera en afirmar que no se veía capaz de disfrutar de la recompensa y dejar sin nada al resto."No puedo", decía su compañera coincidiendo con ella. "Pero entonces todo el arroz y las latas para nosotras", explicaba la peluquera pensando en su regreso junto al grupo. A pesar de la generosidad que mostraron durante la prueba, su llegada fue de lo más abrupta: "Llorando me he bajado por vuestro maíz", explicaba tajante Bea. "Por mí, la parte de la lata que me corresponde para vosotras", contestaba Antonio Pavón para sorpresa de todos. Y mientras que la una agradeció este gesto, la ganadora de Gran Hermano 17 no hizo lo mismo: "Yo no le voy a dar las gracias porque lo hace por quedar bien, estas cosas me sobran".
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