FOTOGALERÍA: Las 10 imágenes más sorprendentes de Miguel Ángel Silvestre como Pablo Ibar

Con las manos esposadas y su cara asomando tras las rejas de una celda, Miguel Ángel Silvestre aparece en una de sus primeras imágenes caracterizado como Pablo Ibar para la serie 'En el corredor de la muerte', la serie de los creadores de Fariña y basada en el libro de Nacho Carretero que verá la luz el 13 de septiembre en Movistar +. Una serie de cuatro episodios que contará la historia del español-estadounidense Ibar, declarado culpable de un triple asesinato ocurrido en Florida en 1994.

Todo comenzó el 27 de enero de 1994. Los cuerpos de un hombre y dos modelos de 25 años aparecen acribillados a tiros en casa del dueño de un club nocturno. La Policía encuentra una cámara instalada en el salón de la víctima que ha grabado el asesinato. Esas imágenes son la pista principal de la policía… Por eso, se decide distribuir lo más valiosos que hay en ellas: el rostro borroso de uno de los asaltantes. Tres semanas más tarde, en una comisaría de otro distrito, un agente cree reconocer a uno de los asesinos: es Pablo Ibar, un hombre de nacionalidad española al que acababan de detener junto a unos amigos por un robo menor. Pablo asegura que es inocente. Ninguna de las pruebas halladas en el lugar del crimen lo inculpan… Pero de nada sirve. Pablo es condenado y enviado al corredor de la muerte. Esta es la historia de lucha de un hombre por demostrar su inocencia. La historia de una familia que nunca se ha rendido.

Miguel Ángel Silvestre en una de las imágenes más sorprendentes y hasta ahora nunca vistas en la que aparece irreconocible en la ficción. Se trata de uno de los papeles más difíciles de su carrera, de ahí que reconozca tener cierto miedo a la hora de poder explicar esas sensaciones que ha vivido ante un rodaje tan delicado. Miguel Ángel Silvestre reconoce que ha sido una injusticia y confía plenamente en la inocencia de Pablo Ibar.

De la mano de Bambú Producciones ('Fariña', 'Las chicas del cable') y Movistar+, el intérprete se mete en la piel del español-estadounidense Pablo Ibar que día tras día lucha por demostrar su inocencia mientras espera en el corredor de la muerte acusado de un triple asesinato ocurrido en 1994 en la localidad de Miramar (Florida) que asegura no haber cometido. 

Uno de los fotogramas del personaje de Silvestre 'En el corredor de la muerte' mientras le curan las heridas en la enfermería de prisión. Pablo era un joven que tenía sueños y una vida por delante que se truncó el mismo día que lo acusaron de los asesinatos. La serie aborda la investigación, los interrogatorios, los juicios, una sentencia desproporcionada y una esperanza recurrente: la de que el juicio se repita.

Además de la historia de Pablo Ibas, es la historia de una familia que nunca se ha rendido. La ficción también cuenta con Tanya Ibar (Marisé Álvarez), la novia de Pablo Ibar que, con el tiempo, se convirtió en su esposa y en madre de sus dos hijos. Una mujer que cree en la inocencia de Pablo de manera incondicional porque la noche de los hechos Pablo dormía a su lado. Cuando lo encarcelaron, ella tenía 16 años. 

Tanya, que trabajaba entonces como enfermera, hizo caso omiso de las reiteradas sugerencias de Pablo Ibar, que en varias ocasiones la invitó a que rehiciera su vida. Han sido 25 años de un amor inquebrantable: se casaron y tuvieron dos hijos que hoy tienen 7 y 12 años.

Han pasado nada menos que 25 años, 16 de ellos con Pablo Ibar en el corredor de la muerte, en los que ambos han demostrado que su relación es inquebrantable: se han casado y han tenido dos hijos que hoy tienen 7 y 12 años. El comienzo fue quizás lo más difícil: pasó varios años en el penal del condado de Broward, donde las visitas son siempre a través de un cristal. No pudieron abrazarse ni besarse hasta que se casaron en 1998.

Tras el juicio del año 2000, en el que fue condenado a muerte, Pablo Ibar fue trasladado a la Prisión Estatal de Florida, donde permaneció 16 años pendiente de si iba a ser o no ejecutado. Un tiempo en que el que, sábado tras sábado, su mujer lo visitaba aunque para ello tuviera que realizar un trayecto de cuatro horas de ida y cuatro de vuelta. 

El pasado mes de mayo, Pablo Ibar se libró de la pena de muerte a la que se ha enfrentado durante 16 años, pero fue condenado a cadena perpetua tras ser hallado en enero pasado culpable de ese crimen. El sentido alegato de su esposa, Tanya, que hizo llorar a toda la sala, sirvió para ablandar el corazón del jurado que, finalmente, ha sentenciado al español Pablo Ibar a cadena perpetua. "Amo a ese hombre, sé que es una buena persona y un padre ejemplar", subrayaba ante el tribunal entre sollozos.