El verde oscuro fue el color elegido por la reina Isabel II para honrar la memoria de su marido, el duque de Edimburgo, fallecido en abril de 2021, en el servicio de acción de gracias por la vida de Su Alteza Real celebrado hoy en la Abadía de Westminster (Londres). Un tono que ha estado presente en el look de otras de las invitadas al servicio religioso como han sido los diseños escogidos por la duquesa de Cornualles, la reina Letizia, la princesa Beatriz de Holanda y la princesa Ana de Inglaterra, a modo de sutil homenaje al difunto duque, cuyo color de uniforme oficial era el llamado "verde Edimburgo".
Todas ellas eligieron este color muy acorde a un homenaje de estas características y no tan solemne como el negro tradicional para un funeral. El verde, a su vez, se asocia al condado escocés del duque y es acorde no solo con la conciecia ecológica del marido de la reina Isabel II, que siempre defendió las causas medioambientales, sino también con su larga y exitosa carrera militar. Este color se usó para los uniformes de su personal (el paje del duque en la coronación vestía de verde oscuro y plata) y para sus automóviles privados.
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Recordemos que el coche fúnebre que diseño Felipe de Edimburgo para su funeral fue un Land Rover Defender TD5 130 en color verde militar. El tono original de este vehículo antes de las modificaciones era un verde mucho más vivo, pero él pidió que se cambiara por un verde más oscuro, un color que recordaba a los Land Rover militares, y que eran del gusto del duque, que fue teniente de la Marina Real británica, un cargo que le unía estrechamente con el ejército británico. Este vehículo diseñado 18 años antes de su fallecimiento fue el encargado de portar su féretro en su funeral celebrado el pasado 17 de abril y al que asistieron treinta personas.
La elección de la reina Letizia para asistir al servicio religioso acompañada de su marido, el rey Felipe VI, ha sido un look de abrigo-vestido a juego con un nuevo tocado del mismo tono de la sombrerería madrileña Balel. La princesa Beatriz lució un vestido verde a juego con su sombrero y una capa por encima en color negro, como vimos a su entrada en la Abadía acompañada de los reyes Guillermo y Máxima de Holanda.
Camila Parker Bowles llegó a la ceremonia en recuerdo al Duque con un vestido verde oscuro y un tocado acompañada de Carlos de Inglaterra. La duquesa de Cornualles quiso rendir homenaje al príncipe Felipe al usar su broche conmemorativo del regimiento con el que estuvo asociado durante 70 años. Se trata de una joya con un cuerno de corneta plateado, que también lució la esposa del príncipe Carlos en su funeral el año pasado. Isabel II también tuvo un guiño conmovedor con su marido, además del color, al lucir el broche de escarabajo de oro amarillo, rubíes y diamantes, diseñado por Andrew Grima, que le regaló su esposo en 1966. Ana de Inglaterra, la hija de Isabel II, también escogió un abrigo y tocado a juego con su vestido todo en color verde e hizo su entrada en el templo junto a su marido, el vicealmirante Sir Timothy Laurence. Mientras que otros miembros de la realeza asistentes, incluidas la duquesa de Cambridge, la condesa de Wessex y Zara Tindall, optaron por el azul marino para el multitudinario homenaje al duque.
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