Que Britney está pasando por uno de sus mejores momentos es indiscutible. A nivel profesional, ha conseguido con su gira Circus volver a ser la estrella que era allá por el año dos mil cuando lanzó su primer CD, Ups I did it again!. Desde aquel look de colegiala hasta el actual, de maestro de pista circense, látigo incluido, han pasado muchas cosas en su vida personal: un matrimonio fallido con Kevin Federline, dos hijos, un parón en su carrera artística, una crisis nerviosa, su radical corte de pelo…
Con todo eso en un rincón de su memoria, Britney muestra estos días su faceta más maternal. Volcada a partes iguales en su carrera y su familia, aprovechó su visita a Londres, donde tiene programados varios conciertos, para volvernos a dejar esas imágenes tiernas que demuestran que lo más importante para ella son sus pequeños.
Jayden James y Sean Preston visitaron el zoo de la capital inglesa con su madre y la corte de guardaespaldas que la acompañan. Se subieron al carrousel lleno de caballitos de madera, pasearon ante las jaulas de los animales y se fueron a casa con los bolsillos llenos de muñecos de peluche. Pendiente de ellos en todo momento, Britney disfrutó a través de sus ojos del sol y el aire puro, aunque en esta ocasión no la acompañaba su novio y agente Jason Trawick, el principal “culpable” de su sonrisa.
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