Hoy se celebra el Día Internacional de la Mujer, y Meghan Markle, feminista convencida desde antes de convertirse en Duquesa, no podía dejar de ejercer de altavoz por esta causa. La mujer del príncipe Harry es hoy una de las ponentes principales en el evento organizado por la organización Commonwealth Trust creada por la propia reina de Inglaterra. De esta manera, se sienta junto a activistas como Annie Lennox, Adwoa Aboah o Julia Gillard para hablar sobre los problemas a los que se continúan enfrentando las mujeres hoy en día. Para la ocasión, ha escogido un sofisticado y correcto estilismo bicolor, teñido de los dos colores que siempre funcionan juntos: blanco y negro.
La duquesa de Sussex ha vuelto a elegir un diseño ceñido para enmarcar su barriguita premamá, esta vez un modelo con el que a la vez presumía de piernas. Meghan se ha decantado por un minivestido estampado que, sumado a sus tacones infinitos, potenciaba sus esbeltas piernas, de nuevo al aire y sin medias. La mujer del príncipe Harry no podía dejar pasar la oportunidad de rendir homenaje a una fecha tan señalada también mediante su vestidor. No es la primera vez que recurre a sus elecciones de moda para mandar mensajes, y el gesto significativo de su conjunto de hoy ha venido de parte del patrón que decoraba el tejido de la pieza, un print geométrico que recuerda a numerosos rostros femeninos en clave minimalista.
Esta creación está firmada por la casa Reiss y puede adquirirse a través de su página web por 185 libras (unos 215 euros aproximadamente). Está inspirada en la moda de los años 60, tal y como explican desde la marca, y cuenta con cuello perkins, silueta recta y puños fruncidos.
Para protegerse del frío de la capital, ha agregado una chaqueta tipo blazer en negro de la firma británica Alexander McQueen, a juego con sus stilettos de tacón alto de Manolo Blahnik y el bolso de mano con detalles dorados de Stella McCartney. En cuanto al look de belleza, ha apostado por su característica naturalidad para el maquillaje, y ha recogido su melena oscura en un moño bajo con volumen en la coronilla, uno de sus peinados preferidos para las grandes citas últimamente.
