Una de sus cartas de presentación podrá ser la discreción con la que lleva su vida privada, sin embargo de puertas para fuera es imposible que Bimba Bosé pase desapercibida. Sus imposibles estilismos, en lo que a su pelo se refiere, se convierten en el punto de mira, y eso es algo a lo que parece estar ya acostumbrada. Bimba, que ha seguido los pasos artísticos de su tío Miguel, con el que colaboró en el último disco del cantante, ha llevado el pelo de todos los colores, una "tradición" que comenzó su abuela, Lucía Bosé. Ahora Bimba lo lleva fucsia, aunque, con el fin de evitar miradas "indiscretas" lo llevaba camuflado con un gorro de lana negro que le resguardaba del gélido frío madrileño.
La sobrina de Miguel Bosé, como la gran mayoría de los españoles estos días, se dejo ver ayer realizando algunas compras navideñas, aunque no lo hizo sola sino en compañía de su hija June y de su madre, la orgullosa abuela Lucía Bosé.
Bimba, quien ha pospuesto sus conciertos con su grupo The Cabriolets y sus trabajos como modelo, se encuentra enteramente dedicada a su hija June, quien vino al mundo el pasado 9 de junio.
Bimba, no se estrena como madre. Tiene otra hija, Dora. Ambas fruto de su matrimonio con le realizador y músico Diego Postigo. Estas serán unas Navidades especiales para ellos, con sus dos pequeñas en casa. Mientras llega el momento de reunir a la familia en torno a la mesa, madre, hija y nieta se divirtieron en un día de shopping.
Para Bimba lo más importante es su familia. Lleva tatuada una 'D' de Diego y de Dora en su muñeca izquierda, y un corazón debajo de su corazón. Así que seguro que el próximo tatuaje será una 'J' dedicada a su hija June.
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