¿Puede el perfeccionismo provocar un trastorno de la conducta alimentaria en adultos?

Hay muchos factores que pueden aumentar la probabilidad de desarrollar algunas enfermedades relacionadas con la comida, como la bulimia, la anorexia o el trastorno por atracón. La autoexigencia, el perfeccionismo o la necesidad de controlar, por ejemplo, son algunos de ellas

Por Nuria Safont

Ciertos rasgos de personalidad como la autoexigencia, el perfeccionismo o la necesidad de controlar todo pueden aumentar la probabilidad de desarrollar un trastorno alimenticio (TCA), incluso en la edad adulta. Por eso, es importante educar sobre la prevención de estas enfermedades y fomentar una relación saludable con la alimentación desde edades tempranas. La detección temprana y el tratamiento adecuado son clave para superar los TCA y recuperar la salud.

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¿Qué son los trastornos de la conducta alimentaria en adultos?

"Los trastornos de conducta alimentaria (TCA) son trastornos mentales caracterizados por un comportamiento patológico frente a la ingesta alimentaria y una obsesión por el control de peso. Surgen como un intento de solución ante una suma de problemas y conflictos personales", explica la Dra. Marta Rodríguez de Lorenzo, directora médico psiquiatra de la Clínica Renace.

La especialista aclara que este tipo de trastornos se suelen explicar como un iceberg, donde un 10 % es lo visible, los síntomas, y un 90% es lo sumergido, lo que no se ve, que son las emociones e inseguridades que originan la enfermedad. "En esta punta del iceberg, los signos alimentarios son muy variables. Si la persona disminuye la ingesta, selecciona alimentos o evita comer ciertas cosas, estamos hablando de sintomatología restrictiva. Otras manifestaciones clínicas son los atracones de comida, que se caracterizan por una gran cantidad de comida en un momento determinado, con un gran sentimiento de descontrol que posteriormente se convierte en culpa y vergüenza". 

Otros son la sintomatología purgativa, que puede consistir en vomitar, tomar laxantes o similares tras la simple ingesta o tras un atracón con la intención de compensar lo comido, así como el uso compulsivo del ejercicio físico.

"Los TCA son un “camaleón” que pueden ir oscilando de unas manifestaciones a otras. Además, suelen acompañarse de otra sintomatología como la depresiva, la ansiosa, la obsesiva, y el insomnio, generalmente", indica la Dra. Marta Rodríguez. 

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¿Cómo se relaciona el perfeccionismo con los trastornos de la conducta alimentaria en adultos? 

Ciertos rasgos de personalidad pueden ser factores de riesgo para desarrollar un TCA como un excesivo perfeccionismo, un alto grado de autoexigencia, el ser muy estricto con uno mismo y normativo, la necesidad de controlar todo y ser poco flexible. Esto sumado a una baja autoestima, una tendencia a la introversión y la inseguridad hacen de caldo de cultivo, que si se suma por ejemplo el simple hecho de ser mujer, el estar una crisis vital como es la adolescencia, y el haber sufrido algún tipo de acoso o de abuso de cualquier índole, entre otros, pueden desarrollar un TCA.

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¿Qué tipo de terapia es efectiva para tratar los trastornos de la conducta alimentaria en adultos?

El equipo multidisciplinar que trata los TCA debe tener al menos psicólogo, psiquiatra y nutricionista. Por tanto, podemos hablar de tres formas de tratamiento que deberían ir de la mano: la terapia psicológica, el tratamiento farmacológico y el soporte nutricional.

La terapia psicológica es el pilar fundamental para la cura de estos trastornos mentales. Hay diferentes tipos de formatos: individual, grupal y familiar, con diferentes frecuencias. "Desde nuestra clínica, Renace, que somos un tratamiento especializado ambulatorio, recomendamos los tres en conjunto. Fomentamos mucho la intervención con las familias porque su papel nos parece crucial para el manejo y el pronóstico de la enfermedad", indica la psiquiatra. 

El tratamiento farmacológico suele ser una ayuda para disminuir en gran medida los síntomas y aumentar así la efectividad de la terapia psicológica. Los TCA son los trastornos mentales con mayor índice de mortalidad porque afectan a mente y cuerpo, por lo que el acompañamiento nutricional para reaprender a comer y tener un cuerpo sano es necesario.

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¿Cómo se puede ayudar a una persona que sufre este trastorno?

La familia y el círculo de amigos, si bien no es imprescindible, es fundamental para la curación de los TCA. "Siempre decimos que es como una silla de tres patas: el paciente, los profesionales y sus seres queridos", afirma la experta. Si conseguimos una colaboración entre todos, el paciente se podrá curar, aunque siempre es él o ella el agente principal del cambio.

Por eso es importante ampliar el foco y ayudar también a esas familias que lo están pasando muy mal, ayudarles a facilitando la comunicación entre ellos, provocando así cambios en las dinámicas y proporcionando información.

"Nosotros, por ejemplo, invitamos a venir padres, madres, hermanos, parejas, amigos, compañeros, para poder dar también un sostén a ellos. Realizamos acompañamiento familiar y sesiones de psicoeducación a estos, además de psicoterapia familiar como intervención. Asimismo, el apoyo entre familias nos parece muy importante, por lo que recomendamos también grupos de padres o también llamados grupos multifamiliares", concluye la psiquiatra de la Clínica Renace. 

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