1/12 © IN56 Interiorismo

Se pusieron de moda hace unos años en decoración de interiores y desde entonces no han dejado de formar parte de los proyectos más estilosos. Los cerramientos de cristal en interiores ofrecen muchas posibilidades cuando se trata de comunicar visualmente pero delimitar. Conceden amplitud y fluidez a los espacios, los hacen más ligeros aunque compartimentados y favorecen que la luz fluya. Sustituir una pared por un cerramiento o pared de cristal es una solución para cualquier estancia de la casa.

 

Fijo y puerta de cristal

Este cerramiento es obra del estudio IN56 Interiorismo que ha instalado un fijo con ligera perfilería en una parte de la pared, coincidiendo con el inicio de la escalera y una puerta ancha abatible de suelo a techo, toda en cristal. Cerrada, se crea una sensación de cerramiento de cristal fijo.

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2/12 © Christopher Elliott Design

Entre dormitorio y baño

Un espacio en suite se presta a eliminar alguna pared o tabique ciego para sustituirlo por un cerramiento de cristal. Así zona de descanso y baño quedan más integrados aunque con la tranquilidad de no "sufrir" tanto los ruidos desde la cama como si no hubiera delimitación. Esta solución además favorece que la luz alcance el baño cuando este no tiene ventana. Christopher Elliott Design optó por una estética contemporánea con un cerramiento de perfilería metálica en negro con barrotillo.

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3/12 © Andrew Franz

En pasillos largos y estrechos

¡Imagina cómo cambia la sensación! Cuando tengas un pasillo alargado y estrecho, con paredes y puertas a un lado o a ambos, sustituir un trozo de tabique por un cerramiento acristalado dará amplitud, hará visualmente más corto el ambiente y favorecerá que el pasillo se llene de luz natural; como sucede en este proyecto de Andrew Franz.

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4/12 © Sandra Rojo

Un fijo acristalado para dejar pasar la luz

Coblonal Interiorisme firma este proyecto en el que se abre un fijo en la pared para ganar amplitud en la cocina. De esta manera, la luz natural del salón llega al espacio interior y, al mismo tiempo, no se "cierra" por completo la cocina. Esta solución es perfecta para estancias interiores o zonas de paso porque una pared es más ligera con vanos fijos que pueden llevar barrotillo, solo perfilería perimetral o un cristal sin más.

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5/12 © Natalia Zubizarreta Interiorismo

Vano acristalado en la parte superior de la pared

Natalia Zubizarreta Interiorismo propone este ejemplo con un fijo acristalado que se instala en la parte superior del tabique que delimita el salón y la escalera. De esta manera la luz natural llega a una zona de paso que podría queda más oscura y no se cierran tanto los ambientes. Si optas por un vano de este tipo de cristal sin perfiles, prácticamente pasa inadvertido a la vista. Es una buena idea también para mantener la privacidad en los baños pero dejar que les llegue luz natural.

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6/12 © Cartelle Design

Entre cocina y salón o comedor

Uno de los cerramientos más frecuentes es el que se instala entre la cocina y la sala de estar, para delimitar sin cerrar por completo -al menos visualmente-. Hay muchas opciones para diseñar este tipo de solución en una cocina abierta. Bien con puertas correderas o abatibles y fijo en los laterales. Con un marco acristalado, solo con puertas, algún tabique fijo que delimite pero sin puerta… Se pueden instalar cerramientos lisos o con barrotillo, en madera o metal y lacados en cualquier color. El diseño, su altura, las puertas y el color, harán que el cerramiento tenga más o menos peso en el conjunto, sin embargo siempre será una seña de estilo. Aquí, Cartelle Design propone una opción de paneles fijos de suelo a techo y línea vertical.

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7/12 © Dröm Living

Otra opción de cerramiento con puertas correderas

Con la misma idea que acabamos de ver, un cerramiento entre cocina y comedor, pero con un resultado estético diferente. En este caso es el estudio Dröm Living el que propone una solución acristalada con fijos laterales y puertas centrales correderas, con guías encastradas. Su acabado en color blanco no define tanto el estilo más industrial tipo loft, aunque marca tendencia.

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8/12 © IN56 Interiorismo

Un panel de cristal que delimita la escalera

El estudio IN56 Interiorismo ha optado en este proyecto por un panel fijo de cristal transparente que delimita la zona de paso de la escalera del comedor. La continuidad visual es total y la sensación de comunicación completa. Pero al mismo tiempo se demarcan los espacios y se aísla la zona de día para que no se pierda tanto el calor por el tiro de la escalera.

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9/12 © Ollie Hammick para Brosh Architects

¿Mampara o cerramiento en el baño?

Hay mamparas de bañera o ducha que parecen más cerramientos que mamparas en sí aunque hagan su función. Es habitual también ver cerramientos de cristal en esta estancia bien para delimitar la zona de la ducha, bien para crear cabinas que independicen la zona del inodoro. En otras ocasiones, el cerramiento se instala entre la ducha y la pared del dormitorio, en lugar del tabique. Hay cristales que permiten el oscurecimiento gracias a la tecnología y otros con sistemas de doble cristal con cortina de lamas en medio que favorecen ganar intimidad cuando se precisa en uno de los dos espacios.

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10/12 © Erlantz Biderbost

Como si de una cabina o pecera se tratase

Gracias a los cerramientos de cristal para interior es posible crear espacios independientes ligeros. Se trata de crear un cubo dentro de una estancia, como en este caso ha diseñado el estudio Sube Interiorismo. El despacho -integrado en el salón- queda independizado por un cerramiento en forma de L en madera y cristal con puerta corredera.

11/12 © Helena Martín Arquitecta

Puertas de cristal

Las puertas acristaladas son otro tipo de cerramiento que puedes contemplar para decorar, sin necesidad de convertir todo un tabique en acristalado. Toma como referencia esta propuesta de la arquitecta Helena Martín: una doble puerta corredera de madera con amplia superficie acristalada que comunica salón y cocina. Cuando se quiere comunicar los espacios e integrarlos, las puertas se integran en el tabique dejando un gran vano de paso. Hay un tipo de puerta para cada estancia.

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12/12 © Erlantz Biderbost

Entre dormitorio y vestidor

Y como último ejemplo acerca de cómo diseñar un cerramiento de cristal para interior, en cualquier estancia de la casa, este original cabecero con parte ciega abajo y cerramiento acristalado arriba. El elemento en su conjunto delimita la zona de descanso y el vestidor, que tiene poca anchura y de esta manera se evita el efecto tubo. Es un diseño de Sube Interiorismo.

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