Solo hay que saber cómo hacerlo. No todas las ideas son aptas para pisos pequeños. Por eso hemos elaborado una guía infalible de ideas que puedes aplicar tranquilamente en tu apartamento y acertar. Son ideas que funcionan para que el espacio se sienta más amplio y aprovechado. Soluciones para que no falte nada, y que al mismo tiempo ese 'nada' no lo llene todo.

Distribuciones abiertas

A la hora de distribuir un piso pequeño hay que olvidarse de lo convencional. Se trata de ganar centímetros reales y sensación visual de espacio. Así que habrá que prescindir de algunos tabiques que "suelen estar ahí". Con la comunicación y la no compartimentación lograrás el objetivo. Punto uno de esta guía: olvidarse de lo establecido y derribar barreras. En este piso pequeño, k.o.t architects, ha integrado por completo la cocina, distribuida en línea en un frente adosado a la pared, en el salón y comedor; todo en una planta rectangular.

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Sí al cristal, paredes y mobiliario

Transparente o ahumado, pero el cristal te permite componer estancias o ambientes que necesitas demarcar en un piso pequeño sin llenar. Son paredes que están, pero que casi no se ven. Sirven para que con ellas puedas apoyar algún mueble que sientas que tiene límite y dejan que la vista continúe entre espacios. Además, no suponen un límite para la circulación de la luz. Todo son ventajas. Y de la misma manera que aparecen en esta guía las paredes de cristal, no hay que olvidar que este material tiene un efecto de ligereza, usado también en los muebles. En este apartamento, Jacobs-Yaniv Architects, divide con paneles correderos de gran tamaño de cristal con una discreta perfilería en color negro.

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Vista-no vista, paneles fijos y correderos

Otro tipo de elemento que hay que contemplar para jugar con las divisiones y transiciones que no corten en un piso pequeño es este: paneles fijo o correderos, de suelo a techo, con listones o tramas que dejen pasar la luz y la vista. Este tipo de soluciones delimita, aportando cierta privacidad aunque sin cerrar completamente. Es un nivel superior al panel o pared de cristal, aunque mucho más ligero que un tabique. Úsalo cuando quieras demarcar un ambiente o preservar de visión directa, por ejemplo, el salón desde el recibidor. Esta es una propuesta del estudio Bombí + Gómez.

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Que no falte la luz en un piso pequeño

En la guía de imprescindibles para ampliar el espacio en pisos mini no puede faltar la mención a la luz natural. En esa redistribución de los espacios hay que orientarse a que todos los ambientes cuenten con luz natural. Esta siempre juega a favor de la sensación de amplitud. Pero además, una ventana es un punto de extensión del espacio. De la mirada. Si además, cualquier apartamento cuenta con una terraza, ¡hay que tenerla muy en cuenta! Su función será la de proyectar allí la vida interior. Decorarla y convertirla en un espacio más y, a ser posible, con cerramientos que permitan una gran conexión in & out. Este salón está decorado por Alberto Torres del estudio de PortobelloStreet.es.

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Las líneas curvas juegan a favor del espacio

Las líneas curvas aportan movimiento y sensación de amplitud. Son un acierto usarlas en muebles y complementos para decorar un piso pequeño. Si además, como en este proyecto del estudio de interiorismo y decoración de Marta Estarriol, están presentes en el conjunto de comedor cuando este ocupa una posición de transición desde el salón a la cocina, ¡es de diez!

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El juego de colores

A la hora de decorar un piso pequeño, en la guía para hacerlo hay una mención especial a la paleta cromática que se debe usar cuando no sobra el espacio. Ningún color está prohibido. Todo depende de cómo se use, dónde, en qué cantidad y según las características del espacio. Porque los pisos pequeños pueden ser más o menos luminosos, contar con una planta más cuadrada o rectangular. El color ha de jugar a favor del espacio. Con él se puede sacar partido a la luz y a la sensación de amplitud. Eso no quita para que se puedan incluir detalles en negro, cuando de primeras, es un color antagónico de las casas de menor tamaño. Los tonos claros, siempre vienen bien. Y de los colores, las versiones suaves son mejores que las oscuras, salvo que solo aparezcan en notas puntuales. Los colores luminosos (amarillo, ocre, camal…) aportan calidez y el azul y el verde frescura. Este salón es una propuesta de Kinze Studio.

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Juego de espejos

Reflejan la luz, conceden profundidad y amplían una zona. Usados bien, los espejos son grandes aliados de la decoración de un piso pequeño. Y mencionamos la idea de "usados bien" porque lo que reflejan debe ayudar a sentir la zona más grande. Si el espejo refleja una pared lisa y cercana, no tendrás el efecto deseado. Es ideal cuando reflejan una ventana o zona abierta, una pared bonita que no queda excesivamente cerca o cuanto, como en este proyecto de la interiorista Marta Estarriol, una gran luna de espejo cubre un panel corredero que separa dormitorio y baño y lo hace con un reflejo de una pared alejada.

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Los muebles y accesorios en su tamaño justo

Otras de las claves para decorar con acierto un piso mini es escoger adecuadamente los muebles en un tamaño que esté acorde con el espacio. Ni muy grandes para que no corten el paso o queden pegados unos a otros, ni demasiado pequeños como para que se sientan "perdidos" en el espacio o, incluso, ridículos. Un mueble pequeño da la sensación de pobreza y puede, incluso, hacer que se sienta más reducido un ambiente. Es preferible escoger alguna pieza de mayor tamaño y reducir el número de elementos. Por ejemplo, con los cuadros pasa algo parecido en pisos pequeños. Es preferible una obra grande en la pared que varias pequeñas. El truco ante un mueble grande es respetar el aire alrededor, esa zona despejada junto a la pieza. También es bueno optar por varias mesas auxiliares como composición de mesa de centro que una más rígida y grande. De esta manera se equilibra el peso del sofá. Salón-comedor decorado por el estudio Egue y Seta.

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Abrir la cocina

Ampliar los metros de la zona social con una cocina integrada es una buena idea en los pisos pequeños. Así el área cobra más sentido. Se hace vida en todo el espacio. La cocina puede quedar totalmente integrada, delimitada por una isla o península o jugar con algunas de las soluciones de tabiquería ligera que hemos visto al inicio de esta guía. Además, es importante que la luz llegue a cada rincón y cuando las cocinas son oscuras o sin ventilación, abrirlas las llena de luminosidad. Proyecto diseñado por Pia Capdevila Interiorismo.

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Muebles con doble uso o soluciones polivalentes

Puede que no haya espacio para todo en un piso pequeño. Quizá hay ambientes de los que prescindir… o no. Es decir, puede que no haya espacio para un comedor, pero eso no significa que no puedas tener uno. Piensa que si adosas una mesa a los muebles de la cocina o creas una barra como mesa de comedor, tendrás más espacio para la zona de estar. Si la mesa de centro es convertible y elevable, también tendrás comedor. ¿Necesitas un espacio de trabajo? Puede estar oculto dentro de un armario o integrado en una librería. Los muebles con doble uso te ayudarán a no dejarte nada que necesites. Detalle de una barra sobre la isla de la cocina, propuesta de la firma Cocinas Método.

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