Ensaladas hay muchas y de todo tipo, y aunque tendemos a asociarlas con un plato rápido, fácil, refrescante y de poca enjundia, no siempre tiene por qué ser así. Hay opciones que elevan este tipo de recetas a lo más alto. Aquí te traemos una que convertimos en una elaboración de lo más elegante por la incorporación de un ingrediente de lujo. Porque por mucho que sean lentejas, escogemos las mejores, las más finas y delicadas, una legumbre excepcional. La variedad 'beluga o caviar' lleva asociado un cierto toque de sofisticación que aprovechamos para preparar una receta única, con la que vas a sorprender a cualquiera. Se trata de una ensalada con naranja, piñones y queso de cabra, a la que aportamos un toque fresco con cebolla de verdeo troceada.
¿Qué es la lenteja beluga o caviar?
Quizás son menos conocidas que otras variedades como la pardina, la castellana o la naranja. Pero la lenteja conocida como 'beluga' o 'caviar' es un producto que merece la pena descubrir. Se cultivan principalmente en Asia Central y otras regiones como el norte de África y algunas partes de Europa. Son de tamaño pequeño y tienen forma de bolita, su color es negro brillante y, una vez cocida, su textura es más firme y su sabor resulta más suave, con un ligero toque a nuez. Se parecen a las pequeñas huevas del esturión en su aspecto externo. Son perfectas para platos que requieran una lenteja que mantenga su forma después de cocinarlas.
¿Cómo hay que cocer la lenteja beluga o caviar?
Al igual que otras lentejas, las beluga son una excelente fuente de proteínas vegetales, fibra, hierro, y antioxidantes. Además, son excepcionalmente ricas en antocianinas, un tipo de antioxidante que también se encuentra en los arándanos y que tiene propiedades antiinflamatorias. Se emplean para sopas, guisos y guarniciones. No necesitan remojo previo y se cocinan más rápido que muchas otras legumbres, aproximadamente en 20-30 minutos, partiendo de agua fría, las tienes listas. Además, no se deshacen fácilmente, lo que las hace ideales para ensaladas o platos donde se necesiten mantener su forma. Añade la sal una vez que las tengas hervidas y escurridas.
Y a partir de ahí, mézclalas con diferentes ingredientes. En este caso le pondremos rodajas de naranja, daditos de queso de cabra, piñones tostados y cebolla de verdeo troceada. La aliñamos con una vinagreta tradicional, pero esto también lo dejamos a tu elección.