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clock 30min | easyFácil | 8 PORCIONES

Tarta de tres chocolates sin horno

Esta es la tarta perfecta para los más chocolateros de la casa, porque además es muy fácil de hacer, los ingredientes son sencillos de encontrar y no necesitas horno. Tan solo, un tiempo prudencial de espera para que enfríe bien en el frigorífico. La decoración final la eliges tú, pero a nosotros nos gusta la idea de mezclarla con unos arándanos frescos o cualquier otro tipo de frutos rojos, pero si quieres aún más chocolate, no lo dudes: pepitas o bombones.

Tarta de tres chocolates

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Esta es la tarta perfecta para los más chocolateros de la casa, porque además es muy fácil de hacer, los ingredientes son sencillos de encontrar y no necesitas horno. Tan solo, un tiempo prudencial de espera para que enfríe bien en el frigorífico. La decoración final la eliges tú, pero a nosotros nos gusta la idea de mezclarla con unos arándanos frescos o cualquier otro tipo de frutos rojos, pero si quieres aún más chocolate, no lo dudes: pepitas o bombones.

Para la base de la tarta
  • 200 g de Galletas tipo María
  • 100 g de Mantequilla derretida o, al menos, en textura pomada
Para la tarta de tres chocolates
  • 600 ml de Nata para cocinar
  • 600 ml de Leche
  • 3 sobres de Cuajada
  • 150 g de Chocolate negro
  • 150 g de Chocolate con leche
  • 150 g de Chocolate blanco
  • Arándanos frescos
BASE DE GALLETA
  1. 1.

    Ponemos todas las galletas en un robot de cocina, batidora o procesador de alimentos y trituramos, buscando una textura tipo arena.


  2. 2.

    Agregamos la mantequilla desecha y batimos bien junto con las galletas hasta que tengan la consistencia de arena mojada. Lo ponemos en el molde que nos vaya a servir para la tarta, cubriendo todo su fondo, aplastando con las manos para compactarlo bien.

  3. 3.

    Introducimos en el frigorífico y conservamos mientras seguimos haciendo el resto de la tarta.
TARTA DE TRES CHOCOLATES
  1. 1.

    A continuación, ponemos en un cazo 200 ml de nata junto con 100 ml de leche y encendemos el fuego, que vaya integrándose a fuego lento.

  2. 2.

    En un bol pequeño, mezclamos otros 100 ml de leche con un sobre de cuajada y removemos con una cuchara esperando que se disuelva por completo.

  3. 3.

    Cuando la nata y la leche ya estén calientes, añadimos el chocolate negro y removemos hasta que se deshaga. En este momento, añadimos la mezcla de cuajada al cazo y removemos un par de minutos, buscando que se integre por completo y espese. Apartamos del fuego y dejamos que se temple.

  4. 4.

    Una vez templado, repartimos por encima de la base de galletas del molde. Reservamos en el frigorífico.


  5. 5.

    Para la segunda capa, repetimos el mismo proceso, pero, en vez de con chocolate negro, lo hacemos con el chocolate con leche.

  6. 6.

    Una vez la mezcla temple, repartimos por encima de la capa de chocolate negro, pero con ayuda de una espátula, para evitar que se mezclen los chocolates y nos queden dos líneas bien definidas.

  7. 7.

    Por último, hacemos lo mismo para la capa de chocolate blanco, con las mismas proporciones y los mismos pasos, ayudándonos de nuevo de una espátula o lengua, para evitar que no se mezclen los chocolates. En este caso, es muy importante, puesto que la diferencia de color es significativa.

  8. 8.

    Con esta última capa templada, introdúcela en el frigorífico unas 3 o 4 horas para que se enfríe bien.

  9. 9.

    Transcurrido este tiempo, cubre toda la superficie con unos arándanos frescos bien lavados y de nuevo, reserva en el frigorífico. Si lo preferimos, podemos decorar nuestra tarta con fideos de chocolate, perlas de chocolate, unos bombones o cualquier otro ingrediente que se te ocurra.