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20min
Fácil
Por
¡HOLA! COCINA
La base de esta preparación se hace como una crema pastelera a la que vamos a añadir café y también nata montada. El resultado podemos tomarlo solo, como un postre, o utilizarlo como relleno de buñuelos, profiteroles, brazos de gitano, tartas, pasteles, etc y como base para el helado de café.
- 1 ud de Yemas de huevo
- 5 cs de Harina de maíz diluída en agua
- 15 g de Azúcar blanca
- 10 g de Azúcar glas
- 100 ml de Nata para montar
- 150 ml de Leche
- 1 cc de Café soluble
- 1 unidad de Vainilla natural
-
1.
Montamos la nata bien firme con varillas eléctricas añadiendo el azúcar glas al final.
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2.
Calentamos en un cazo 100 mililitros de leche con la vaina de vainilla abierta por la mitad y sus semillas raspadas con un cuchillo.
-
3.
Echamos en un cuenco el azúcar, el café soluble y el resto de la leche y mezclamos todo bien.
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4.
Añadimos la yema de huevo y batimos con varillas hasta obtener una mezcla homogénea.
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5.
Retiramos la vainilla e incorporamos la leche caliente muy poco a poco y batiendo con varillas tras cada vez (tras cada incorporación).
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6.
Agregamos la harina de maíz diluida en agua, mezclamos bien y dejamos enfriar del todo.
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7.
Por último, añadimos la nata montada mezclando de arriba abajo, sin batir, para que se mantenga el volumen. Podemos servirla sola o sobre una base de hojaldre, galleta... como relleno de otros postres, etc.
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