Las cosas que se dicen, ¿no se hacen?
Por Juan Rallo
Esto es algo que aprendí hace poco, un cliente y amigo mío me dijo esta frase tan sabia y que cada vez que lo pienso estoy más de acuerdo.
De hecho creo que decir “esta tarde voy al gimnasio” es un acto más de auto convencimiento que de comunicación.
Todos hemos dicho alguna vez, “de hoy no pasa” o “esta tarde empiezo”, con la boca tan grande como pequeña al día siguiente al reconocer la verdad.
Pensando un poco más, todos tenemos un amigo o amiga de esos que se pasan el día diciendo que si luego van a clase de Pilates o si van a correr media maratón. Y tal vez sea casualidad, pero yo no lo creo, que siempre acaban teniendo algún contratiempo que se lo ha impedido.
Y a medida que voy escribiendo esto viene a mi cabeza el típico grupo de tres señoras ya de edad avanzada, que en la playa no dejan de hablar de dietas como si fueran profesionales, pero que padecen de sobrepeso importante.
Las personas que tienen éxitos en sus cambios son personas no suelen hacer ruido, sencillamente dan los pasos adecuados sin perder energías en contarlo al mundo.
Es simple, apuntarse a un gimnasio o comprarse unas buenas zapatillas, consultar con un profesional que te elabore un plan y empezar a moverse, y a comer sano, todo lo demás sobra.
Por eso te recomiendo que antes de leer tu lista de propósitos a todos tus amigos y familiares, pienses realmente en hacerlo y en que cada vez que lo comentas dejas escapar un poco de esa fuerza interior que te va a empujar a llevar una vida un poco más sana. Canaliza tu voluntad y llévala hacia el lado adecuado, hacia la acción.
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Todos hemos dicho alguna vez, “de hoy no pasa” o “esta tarde empiezo”, con la boca tan grande como pequeña al día siguiente al reconocer la verdad.
Pensando un poco más, todos tenemos un amigo o amiga de esos que se pasan el día diciendo que si luego van a clase de Pilates o si van a correr media maratón. Y tal vez sea casualidad, pero yo no lo creo, que siempre acaban teniendo algún contratiempo que se lo ha impedido.
Y a medida que voy escribiendo esto viene a mi cabeza el típico grupo de tres señoras ya de edad avanzada, que en la playa no dejan de hablar de dietas como si fueran profesionales, pero que padecen de sobrepeso importante.
Las personas que tienen éxitos en sus cambios son personas no suelen hacer ruido, sencillamente dan los pasos adecuados sin perder energías en contarlo al mundo.
Es simple, apuntarse a un gimnasio o comprarse unas buenas zapatillas, consultar con un profesional que te elabore un plan y empezar a moverse, y a comer sano, todo lo demás sobra.
Por eso te recomiendo que antes de leer tu lista de propósitos a todos tus amigos y familiares, pienses realmente en hacerlo y en que cada vez que lo comentas dejas escapar un poco de esa fuerza interior que te va a empujar a llevar una vida un poco más sana. Canaliza tu voluntad y llévala hacia el lado adecuado, hacia la acción.