Alba Carrillo sufrió ayer una aparatosa caída antes de entrar en el plató de Fiesta, el programa de Telecinco en el que colabora. La madrileña, de 36 años, estaba dándose los últimos retoques en la sala de maquillaje y peluquería de la cadena cuando tropezó con el cable de un secador. "Al caer se hizo daño en la rodilla y en la muñeca, pero al poco después notó un dolor fortísimo en el brazo, en la zona del codo", dijo la periodista Beatriz Cortázar. Emma García, presentadora del magacín, también expresó su preocupación al enterarse de lo ocurrado. "Su cara era de dolor, incluso se ha mareado, se encontraba muy muy mal". Según añadieron, lo que más le preocupaba a la madrileña eran sus compromisos profesionales. "Tiene muchas cosas organizadas y le da miedo no poder hacerlas".
Tras ser atendida por el servicio médico de Mediaset, la colaboradora fue trasladada al hospital. Allí le confirmaron que se había fracturado la cabeza del radio. Después, se fue a casa y su madre, Lucía Pariente, fue captada por las cámaras cuando iba a comprar la cena. Visiblemente preocupada, la que fuera concursante de Supervivientes aseguró a Europa Pres que su hija se encontraba "mal" aunque más tranquila. "Está con un castañazo de padre y muy señor mío. De momento ha tomado la medicación y está acostadita", declaró.
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Esta mañana, Alba ha reaparecido con su madre y su hijo Lucas en el hospital. La colaboradora ha vuelto al médico para conocer su diagnóstico final. Iba con el brazo izquierdo encabestrillo y, a pesar de lo ocurrido, se mostraba sonriente y amable con la prensa. Finalmente, no tendrá que pasar por quirófano para solventar la rotura, una noticia que le ha producido una enorme alegría. "Estoy muy bien, muy contenta, no me tienen que operar", ha revelado a Europa Press. "Tengo que hacer unos ejercicios, estar con el brazo encabestrillo y venir en una semana para ver cómo va la movilidad", ha añadido.
Alba ha explicado que tardará cuatro semanas en estar recuperada. "He pasado una noche regulín, pero tengo el umbral del dolor alto. Es una rotura, pero al ser joven y tener buena movilidad no me tienen que operar". Al no pasar por quirófano, podrá cumplir con todos sus compromisos. "Voy a poder hacer todo, no hay problema, voy con el brazo encabestrillo. Voy a seguir en la tele y menos mal, porque ya se sabe que si no vas, no estás", ha dicho. Además, ha contado que el pequeño Lucas se ha preocupado mucho por ella. "Estaba con un disgusto, no paraba de llorar. Me han salido mal los hombres, pero el hijo divino", ha bromeado.
La caída de Alba Carrillo en las instalaciones de Mediaset se produce tras los aparatosos accidentes de Belén Esteban, que se fracturó la tibia y el peroné en pleno directo; Chelo García-Cortés, que se rompió el radio en la Sálvame Fashion Week; y Lydia Lozano, que también se dañó el radio antes de salir de casa para ir al trabajo.
Alba Carrillo y su hijo Lucas, entre los invitados al cumpleaños de Hugo, hijo de Marta Castro
