Entramos en exclusiva en la otra gran celebración de Alex Rivière y Christian Sieber en Venecia
La directora creativa y su pareja forman una pareja cosmopolita y glamourosa. Así está siendo el fin de semana que han organizado para sus familiares y amigos
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Alex Rivière y Christian Sieber han sellado su historia de amor con un inolvidable ‘sí, quiero’ en Venecia. No podrían haber elegido un enclave que reflejara mejor su propia personalidad y estilo de vida: elegante, sofisticado, chic… y muy romántico. La directora creativa, empresaria, estilista y modelo, de treinta años, y el fundador del grupo de inversión suizo Vallar Capital, especializado en tecnologías emergentes, forman una pareja cosmopolita y glamourosa. Y así está siendo el fin de semana que han organizado para sus familiares y amigos llegados de todo el mundo.
Un tiempo para disfrutar de la dolce vita que los está transportando a aquella época dorada en la que por las calles de la Serenissima cualquier viandante se podía cruzar con Orson Welles, Dorothy Parker, F. Scott Fitzgerald y Ernest Hemingway, entre otros, o encontrarlos sentados en el Harry’s Bar. El legendario local fundado por Giuseppe Cipriani en 1931 es la cuna de dos inventos que han traspasado espacio y tiempo, el carpaccio y el famoso cóctel Bellini con nombre de pintor (a base de melocotones frescos y prosecco, el espumoso más famoso de Italia). Y ha sido el lugar elegido por la pareja para celebrar una cena de bienvenida a sus invitados más cercanos.
Cipriani no solo es uno de sus restaurantes favoritos, adoran el estilo old school y el respeto a la tradición del Harry’s Bar y, sobre todo, ambos tienen recuerdos imborrables junto a sus respectivas familias cuando aún la vida no había cruzado sus caminos. Era por tanto también un homenaje a aquellos que se fueron, pero siguen más presentes que nunca: el padre de Alex, el empresario Jaime Alfonso Rivière Llobet, fallecido en 2018, y la madre de Christian, Süreyya Sieber.
El dress code para las aproximadamente setenta asistentes era vestuario de cóctel. Y la novia, que llegó en barco junto a su todavía prometido y sus mejores amigos, descubrió el primero de los tres looks de impacto previstos para el fin de semana de su boda, cumbre de la aristocracia y alta sociedad centroeuropea y la burguesía catalana. Con su inconfundible estilo, sobrio y refinado, pero a la vez moderno y actual, Alex estaba espectacular, como podemos ver en las imágenes exclusivas que publicamos, realizadas por su amigo, el prestigioso fotógrafo Jesús Isnard.
Eligió para este momento especial un vestido midi entallado en tono marfil, realizado en cloqué esculpido, con escote cuadrado, uno de sus preferidos. El diseño está firmado por Emilia Wickstead, una de las creadoras favoritas de la princesa de Gales, Kate Middleton, Meghan Markle, Melania e Ivanka Trump entre otros rostros muy conocidos. Alex completó su estilismo prenunpcial con unos zapatos Romy 100 de Jimmy Choo y pendientes en flor de Montse Esteve, de oro blanco y diamantes. Todos disfrutaron de los platos estrellas del mítico local, situado en una pequeña calle en los aledaños de la plaza de San Marcos y se emocionaron con el brindis de Paula Nata y del socio de Christian.
Al lado de la novia en un momento tan especial de su vida no falta su madre, la elegante diseñadora de interiores Mer Creus, un pilar para su hija, a la que está muy unida; ni sus hermanos, Jaime y Diego, que tendrán un papel muy importante en la ceremonia hoy en el hotel Aman, situado en uno de los palazzos más espectaculares de Venecia y convertido durante este inolvidable fin de semana en el cuartel general y escenario de la felicidad de la pareja y sus ciento cincuenta invitados.
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