Agustín e Isabel Pantoja, testigos del juicio que podría llevar a la cantante de nuevo a la cárcel

La venta de 'Mi Gitana' continúa siendo investigada bajo la sospecha de alzamiento de bienes

Por Marina Ortiz Cortés

La venta del chalet 'Mi Gitana', en 2015, es el centro de la investigación judicial que volverá a sentar en el banquillo a Isabel Pantoja, esta vez junto a su hermano Agustín. El próximo 22 de marzo de 2022, la intérprete de Marinero de luces tiene una cita en los juzgados de Málaga, donde deberá comparecer por la venta de la vivienda que compartió con Julián Muñoz. Está acusada de un presunto delito de insolvencia punible por el que se le piden tres años de cárcel, pero en el momento en el que se produjo la transacción la artista estaba en la prisión de Alcalá de Guadaíra, por lo que fue su hermano en condición de apoderado quien realizó la gestión

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Según publica Look, la ley considera que con la venta de 'Mi Gitana' se tenían que haber saldado unas deudas que tenía la empresa Panriver 56 (cuya administradora única es Isabel Pantoja) con la sociedad Codabe, que tenía a su vez otro endeudamiento con la compañía Hormofer. Sin embargo, según el fiscal se habría burlado el embargo con un acuerdo extrajudicial plasmado en una escritura ante un notario de Marbella, y una vez realizado este paso, la venta de la finca se produjo a una cuarta entidad por más de 2 millones de euros.

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El acusado principal en el juicio, que empieza en marzo, es la empresa Codabe, señalada como autor de un delito de insolvencia punible tras la denuncia de Hormofer, y el fiscal solicita tres años de prisión para Isabel Pantoja al considerarla cooperadora necesaria de los hechos como administradora única de Panriver 56. Juan Fernández Ramos, el abogado de la cantante desde 2017 y hasta hace solo unos meses, hizo llegar un comunicado el pasado mes de febrero en el que se hacía saber que había sido Agustín Pantoja quien había firmado el documento de venta. Sin embargo, este jueves en El programa de Ana Rosa, ya actuando en calidad de ex representante legal de la intérprete, ha explicado que fue despedido por el hermano de la artista de un día para otro porque "se puso nervioso". "Me dijo que él quería llamar a unos testigos y yo le dije que el abogado era yo. Le pedí que me dejara hablar con su hermana, pero no pude hablar con ella", ha confirmado. 

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Pese a haber despedido al abogado, la acusación ha citado a declarar a Agustín, por lo que tendrá que sentarse a responder a las preguntas del juez por el caso que podría volver a llevar a su hermana a prisión. Una situación que recuerda a la cantante uno de sus peores momentos, cuando estuvo en la cárcel entre 2014 y 2016, y llega en una situación especialmente delicada para ella, solo unos meses después de la muerte de doña Ana el pasado 28 de septiembre

Isabel Pantoja adquirió 'Mi Gitana' en abril de 2004. Ubicada en la exclusiva urbanización La Pera, en esta casa, de 800 metros cuadrados, construidos sobre una parcela de 3.500, vivieron la cantante y Julián Muñoz como pareja hasta que el 19 de julio de 2006 la Policía detuvo allí al expolítico en el marco de la 'Operación Malaya'. Isabel se quedó en la casa hasta que, un año después y con Julián en prisión, trasladó su residencia a Madrid. En 2017, el edificio fue demolido y en la actualidad se encuentra aún entre andamios.