La relación entre Julián Contreras Ordoñez y sus hermanos, Francisco y Cayetano Rivera Ordoñez, lleva rota desde noviembre de 2015, cuando, en una entrevista, el coach reveló que él y su padre se habían sentido aislados durante la boda de Eva González y el torero: "Abandonamos el convite en silencio y con las lágrimas en los ojos", dijo entonces. Más de dos años después, el hijo pequeño de la fallecida Carmina Ordoñez quiere que eso cambie. Al menos, así lo ha reconocido en una entrevista ofrecida este fin de semana a Toñi Moreno: "Tengo la voluntad de reconciliación, de verdad, pero no sé si ellos quieren", confesaba.
El joven, que está convencido de que las aguas volverán antes o después a su cauce, ha reconocido su parte de culpa en el conflicto familiar. "Creo que he tenido muchos errores. Yo por mis circunstancias me aislé", admitía. Aunque, más allá de eso, el nacimiento de su sobrino y su ilusión por formar parte de su vida hacía que Julián se emocionase: "Estoy deseando conocer al pequeño Cayetano. Esa es la realidad y nadie tiene que dudarla", revelaba.
Sin embargo, fue hablando de sus sobrinas, principalmente de la hija mayor de Francisco Rivera, con la que más relación ha tenido, cuando la voz de Contreras se rompió: "Mi sobrina Cayetana es lo más cerca de una hija que, a día de hoy, he tenido", confesaba.
Unas palabras a las que Francisco Rivera no ha querido contestar con demasiado detalle. "Ahora mismo no son días para hablar de esos temas", respondía el maestro al ser preguntado por la prensa cuando paseaba por Sevilla junto a su hija y su mujer, Lourdes Montes, el Domingo de Ramos. Con todo, se ha mostrado conciliador con su hermano: "Perdonar es de buen cristiano", ha dicho.
Esta no es la primera vez que ambos hermanos intentan poner punto y final a esta disputa. Ya en diciembre de 2016, y respondiendo a otras declaraciones de Julián, Fran reconcía que “todo en esta vida tiene arreglo”, dejando, eso sí, el tema fuera de los focos. “En cosas de hermanos es mejor que no entre nadie”, dijo entonces.
La situación de Francisco y Cayetano con Julián es muy distinta a la que mantienen con su hermano Kiko. Tras superar varios enfrentamientos, han acercado posturas y su relación pasa por su mejor momento, como puede verse constantemente en redes sociales y en los actos familiares a los que han asistido en los últimos meses tras el nacimiento de la hija de Kiko Rivera e Irene Rosales, Carlota, y el del primer hijo de Eva González y Cayetano.
