El currículum de Paris Hilton es extenso y su estilo de vida, controvertido. La bisnieta de Conrad Hilton, fundador de los Hoteles Hilton, ha realizado trabajos como modelo, empresaria, Dj y hasta ha probado suerte en el mundo de la interpretación, pese a que su incursión en la película 'La casa de cera' la hizo ganadora de un premio Razzie como peor actriz de reparto. Sin embargo, y talentos aparte, si por algo es conocida la mediática heredera es por su ostentosidad.
Entre la desmesurada fortuna de la celebritie se encuentra una hermosa villa en Hollywood Hills valorada en más de 10 millones de dólares y hasta una mansión de dos plantas que cuenta con aire acondicionado, calefacción y muebles de diseño para el disfrute y confort de sus preciadas mascotas. Gracias a su fama y popularidad, Paris puede llegar a ganar hasta 260.000 euros a la hora por pinchar en las discotecas más importantes de Ibiza, donde su presencia acapara focos por encima de muchas de las celebridades que acuden verano tras verano para disfrutar de la isla.
Frente a tanta opulencia, y tras ocupar las primeras filas del ‘front row’ durante la Semana de la Moda de Nueva York en compañía de su inseparable hermana, Nicky Hilton, la socialité ha sido vista recorriendo las calles de la Gran Manzana y sacando a la luz una faceta desconocida hasta el momento y que nada tiene que ver con el lujo. Paris parece que se ha dejado conquistar por el mundo de las manualidades y ha acudido a una conocida tienda de bricolaje para hacer unas compras. Allí ha permanecido durante bastante tiempo y de ella ha salido cargada y en compañía de su novio, Chris Zylka, con quien mantiene una relación desde principios de este año.
Durante la visita, ha revisado la zona de pinturas y se ha parado en las estanterías dedicadas a los adornos de Halloween -por lo que no sería de extrañar que Hilton esté planeando organizar un evento de cara a la festividad- mientras llevaba de la mano unas figuras decorativas de madera con las letras P, H y el símbolo por excelencia de esta generación, la #.
El resultado de este ajetreado día de compras ha sido dos bosas cargadas y muchas incógnitas. ¿Habrá encontrado la celebritie en las manualidades su nueva gran afición?
