En alguna ocasión al Príncipe le costó mantener la mirada fija y es que la procesión de ocho minutos resultó muy emotiva, sobre todo, cuando pasó al lado del carruaje del duque de Edimburgo, con sus dos ponies negros cabizbajos y sobre el asiento su gorra y su guantes de conducir, tal y como él los dejaba
Carlos de Inglaterra siguió la ceremonia al lado de la duquesa de Cornualles, enfrente, al otro lado del Coro, estaba su madre, y en medio, sobre el catafalco, reposaba el féretro del duque de Edimburgo
Hace años el duque de Edimburgo dejó claro que él y su hijo eran distintos, él era pragmático mientras que Carlos era romántico. La relación entre ellos fue complicada, marcada además por la posición de Carlos en la línea de sucesión
El príncipe de Gales fue el primero de la Casa Real en hablar en público tras el fallecimiento del duque de Edimburgo. Fue sencillo y emotivo: "Mi querido papá era alguien especial"
Los príncipes Carlos y Ana durante la procesión funeral. Ellos, los dos hijos mayores del matrimonio, caminaban en primer lugar. Detrás iban los príncipes Eduardo y Andrés, este último retirado de la vida pública desde hace un año y medio