Doña Letizia debuta en solitario como Princesa de Asturias

Por hola.com

La Princesa de Asturias había aceptado presidir el Comité de Honor del 750 aniversario de la fundación de Ciudad Real y los de los actos que con motivo del IV Centenario de la publicación de El Quijote se celebrarán en la capital, en la primavera del 2005, pero y aunque todo apuntaba a que este sería su primer acto en solitario, se impusieron otros motivos de fuerza mayor en las dos últimas jornadas.

De hecho, [dona Letizia] tenía previsto acudir ayer a la Real Academia de la Historia en compañía de su esposo, el [Príncipe de Asturias], pero los planes fueron modificados sobre la marcha al verse comprometido don Felipe a viajar ayer al emirato de Abu Dhabi para asistir a las honras fúnebres del jeque Zayed bin Sultán al-Nahyan. Don Felipe representó a la [Familia Real española] en el entierro de quien era emir y jefe de Estado de los Emiratos Arabes Unidos. Un hombre muy querido cuya última iniciativa política internacional fue la de proponer al ex presidente iraquí, Sadam Hussein, que abandonara el poder para evitar una guerra que dañaría a su pueblo.

Honras fúnebres de un jeque Jefe de Estado
El jeque Zayed bin Sultán al-Nahyan, fundador y líder histórico de la Federación de los Emiratos Árabes Unidos, murió a los 90 años, dejando como heredero frente al emirato al jeque Jalifa bin Zayed al-Nahyan, de 56 años. La ascensión al trono de Abu Dhabi no le confiere, sin embargo, el título de presidente del país que detentaba su progenitor, ya que Emiratos Arabes Unidos (EAU) es una federación de siete reinos, cada uno con su emir, y con una Constitución en la que se establece que el próximo presidente debe ser elegido por los siete emires en un reunión tribal, que podría tener lugar antes de un mes.

El funeral del jeque Zayed bin Sultán al-Nahyan congregó a lo más granado de las Casas reales árabes -entre ellos, el príncipe heredero de Arabia Saudí y el rey de Jordania-, a representantes de las monarquías europeas y a los principales líderes de Oriente Medio y Asia.

Así, mientras don Felipe asistía a las honras fúnebres del jefe de Estado de los Emiratos, su esposa, la Princesa de Asturias presidía su primer acto oficial sola inaugurando el IX Congreso de Academias Iberoamericanas de la Historia bajo el título de: "la América Hispana en los albores de la emancipación".

Sentada bajo un retrato de Felipe V, primer monarca de la Casa de Borbón española -compartió estrado con el presidente de la Real Academia de la Historia, Gonzalo Anes, y el secretario de Estado de Universidades, Salvador Ordóñez-, doña Letizia fue la encargada de abrir y cerrar la sesión y, también de ceder la palabra a los dos primeros ponentes del Congreso: el historiador español Luis Suárez Fernández, y el argentino Eduardo Martiré.