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Queda poco más de un mes para concluir un año en el que se han dado cita algunas de las bodas más importantes de los últimos tiempos. Unos enlaces que, sin duda, pasarán a la historia por romper moldes, congregar realeza y celebrities en una misma Iglesia o por estar protagonizadas por novias capaces de alejarse de los cánones más tradicionales para adaptarse a las últimas tendencias. Desde Chiara Ferragni y su macroboda con hashtag (#theferragnez), a la que se ha considerado por méritos propios como la boda del año, gracias a una recién estrenada duquesa de Sussex, desgranamos las lecciones de estilo con las que pueden tomar buena nota las novias que se casen en 2019.
 

Vestidos desmontables

Parece que la boda de Chiara Ferragni ha supuesto un referente en el mundo nupcial, no solo en su espectacular organización, sino en el vestido que lució de camino al altar. El esperado vestido, creado en exclusiva para ella por Maria Grazia Chiuri para Dior, es un modelo compuesto por un body de cuello cisne y manga larga confeccionado en chantilly, del que parte una voluminosa falda de tul desmontable, con una abertura frontal que muestra sus piernas al caminar. Los diseñadores parecen haber tomado buena nota de esta fórmula y se han lanzado a la aventura de los vestidos de novia desmontables, tanto que firmas como Berta o Morilee by Madeline Gardner hicieron suya su propia versión sobre la pasarela neoyorkina, gracias a cuerpos de encaje con faldas de tul que se pueden quitar y poner.

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Ser fiel a los cortes que te favorecen, hasta en tu vestido de novia

A las 12 en punto del día 19 de mayo, Meghan Markle entraba sola y con paso firme a la Capilla St. George, donde iba a dar comienzo la que muchos han calificado como la boda del año. Con un diseño histórico de Clare Waight Keller para Givenchy, una de sus firmas de cabecera, dejo patente la máxima de todo estilista: ser fiel a tu estilo personal bajo cualquier circusntancia. La duquesa de Sussex lo consiguió con un sencillo patrón de líneas minimalistas confeccionado en cadi de seda, con silueta A y el escote con el que tantas veces la hemos visto en sus actos. Un cuello barco que descubría ligeramente sus hombros y, desde él, nuas líneas que se extendían hasta la parte posterior, dibujando pliegues suaves gracias a la enagua de organza de seda.

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Las novias millennial no llevan velo

Si hasta ahora muchos pensaban que la Familia Real británica era reacia a adaptarse a los nuevos tiempos, Eugenia de York se convirtió en el perfecto ejemplo del aire fresco que inunda, desde hace unos años, la casa de Isabel II. Con motivo de su enlace con Jack Brooksbank, la hija del príncipe Andrés y Sarah Ferguson ha demostrado que la sangre azul que corre por sus venas no ha sido un impedimento para celebrar una boda adaptada a su generación. No solo se demostró en los detalles que rodearon el enlace sino en el propio vestido de novia. Y es que la Princesa británica decidió que con su diseño de Peter Pilotto podía prescindir del velo y con ello, poner un punto y aparte a una arraigada tradición seguida por la mayoría de las royals.

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Escote bustier + transparencias

El día 16 de marzo, Alessandra de Osma se casaba con el príncipe Christian de Hannover, luciendo un diseño clásico y atemporal que, según declaraciones de Jorge Vázquez, artífice del vestido, "cuando se vea dentro de 30 años seguirá sintiéndose ella misma". Se trataba de un romántico modelo de corte princesa, con una gran cola realizado en gazar de seda doble italiana, con cobertura de encaje chantilly rebordado en hilo de seda con motivos florales que inundan la falda, la cola y la zona del escote. Y es precisamente en el escote donde se pone el foco de atención al jugar con las transparencias y las texturas que daban forma al bustier, un clásico recurrente entre royals como la duquesa de Cambridge, cuyo vestido de novia pareció inspirar a muchas mujeres que han pasado por el altar en 2018.

5/13 © @karliekloss

Escote bustier + transparencias

El mismo ejemplo siguió Karlie Kloss, que se casó por sorpresa con su prometido Joshua Kushner el pasado 2018 de julio tras seis años de relación. La modelo y ex-ángel de Victoria´s Secret, confesó en una entrevista a Refinery 29, que "Meghan Markle se iba a convertir en su fuente inspiración para elegir su diseño nupcial". Sin embargo no fue la duquesa de Sussex sino otra royal de la Familia Real británica la que realmente inspiró su look, obra de Maria Grazia Chiuri para Dior. Y es que, este vestido de corte princesa y cubierto de un delicado encaje con el que cubre sus brazos y deja entrever un escote palabra de honor, apunta a que estaba inspirado en la opción que eligió en su día la mujer del príncipe Guillermo.

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Tocados especiales para peinados sencillos

En su boda con Fernando Fitz-James Stuart y Solís, se puede decir que Sofía Palazuelo rompió los cánones estilísticos más clásicos que rigen a las novias de la Casa de Alba. La duquesa de Huéscar, que llevó un sencillo vestido con capa desmontable de Teresa Palazuelo, declinó en la decisión de llevar velo y tiara, algo que los días previos a la boda generó gran expectación, originando cábalas sobre las posibles joyas reales que la joven luciría en su gran día.

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Tocados especiales para peinados sencillos

Sin embargo, y fiel a su estilo sencillo y elegante, prefirió acompañar su habitual recogido bajo y pulido con un delicado tocado de plumas alrededor, una creación fue obra de Teresa Briz en colaboración con Philip Treacy, el sombrerero más prestigioso del mundo. Su vestido, personal, sencillo y de líneas depuradas, no necesitaba mucho más. Las plumas, tan livianas y románticas, favorecen a todo tipo de mujeres y se han convertido, junto a los arreglos florales, en tocados indispensables para una novia, que pueden jugar con gamas cromáticas que van desde los blancos y cremas hasta los rosas y malvas.

8/13 © Peter Lindbergh

Se confirma: el rosa es el nuevo blanco nupcial

La impaciente espera por ver a Marta Ortega vestida de novia terminaba el 16 de noviembre. Tras las quinielas sobre quién sería el diseñador que la vestiría de novia en La Coruña, la gran apuesta estaba en Valentino Haute Couture, y no se equivocaron. Pierpaolo Piccioli, director creativo de la firma, fue el artífice del look nupcial con el que la empresaria de Inditex dio el 'sí quiero' a Carlos Torretta. Marta eligió un diseño que era fiel reflejo de su personaildad y se alejaban de los patrones más clásicos gracias a una camisa de gasa y una falda plisada, ambos de color rosa. Este tono, que se ha labrado un lugar de honor entre los velos de las mujeres más atrevidas de esta temporada, se traslada ahora a los vestidos de novia, tal y como pudimos intuir en el segundo look nupcial de Eugenia de York. Más tarde, la empresaria lo confirmó en su enlace coruñés: el rosa es el perfecto sustitutio del blanco níveo para las nuevas novias de 2019.

9/13 © Redes sociales

El triunfo del zapato plano

La actriz Mandy Moore, protagonista de This is usse casó el 18 de noviembre con el músico Taylor Goldsmith en una íntima ceremonia que tuvo lugar en su casa de Los Ángeles. Con este enlace y siguiendo las directrices de Marta Ortega, la intérprete no solo verifica la nueva era de color en los vestidos de novia, sino que confirma el triunfo del zapato plano como sustituto definitivo de las sandalias de tacón algo, que cada vez está más de moda entre las novias que buscan la comodidad en el día de su boda. La actriz también se alejó de la mayoría en la elección de sus accesorios y acompañó su imponente vestido rosa de Rodarte con unas manoletinas de terciopelo a tono, decoradas con una hebilla-joya en el empeine que no renuciaban a la elegancia.

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Las bodas rústicas continuarán su reinado

En medio de un bosque y rodeada de secuoyas, Hilary Swank contrajo matrimonio en secreto con el empresario Philip Schneider, con el que llevaba dos años de discreta relación. La ceremonia se celebró en Saint Lucia Preserve, una urbanización privada de lujo situada cerca de Carmel, California, donde la novia se mimetizó con el bucólico entorno luciendo una romántica creación de Elie Saab Haute Couture Atelier. El diseño estaba confeccionado con 25 metros de encaje chantilly, 8 metros de chifón de seda y 6 metros de organza de seda, texturas que se entremezclaban con un escote en forma de 'v', una espalda al descubierto y una capa que nacía de los hombros y jugaba a confundirse con una manga corta.

De este modo, se confirma la continuidad de las bodas más románticas, aquellas con esencia campestre y vestidos de intricados bordados que se estaban viendo amenazadas por la simplicidad de las ceremonias más minimalistas, cada vez más de moda entre las novias que buscan detalles sencillos en su día más especial.

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El sustituto del ramo de novia

Siguiendo la tradición francesa, antes de al ceremonia religiosa, la influencer Adenorah se casó por lo civil con Edouard Moreau, luciendo un look de Pronovias nada convencional. Se trataba de un slip-dress de esencia lencera. Estaba cofeccionado en satén de seda, y tenía corte midi, escote drapeado y una sensual espalda al descubierto. El sencillo conjunto se completaba con un velo corto de estética años 50 y unos originales accesorios que nunca hubiésemos imaginado en una novia. ¿Una novia con bolso? Sí, se puede. Sustituyendo al tradicional ramo de flores, Adenorah sujetaba un pequeño tote en color beige de Amélie Pichard. En concreto, el modelo Baby Abag, un diseño mini con asa elaborado en rafia natural con el que dio un giro de 180º a una de los puntos más tradicionales de una boda.

12/13 © Redes sociales

La temporada de las novias con collar

Rocky Barnes nació y creció al sur de California, por lo que la playa y la estética desenfadada de la costa está presente en muchos de esos estilismos que inspiran su estilo gypset. Esta forma bohemia de vestir la trasladó de forma sutil a su look nupcial, sencillo, relajado y firmado por Pronovias. Sin embargo, introdujo uno de los complementos menos habituales en una novia y a los que más suele recurrir en sus looks diarios: las gargantillas. En dorado y en clave 'mini', la influencer pone en relieve unas joyas firmadas por Bychari que van más allá de los recurrentes pendientes y de las tradicionales alianzas. Además, los volvió a utilizar en sus posteriores looks nupciales, por lo que se convierten en una buena y eficaz inversión a tener en cuenta para 2019.

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La nueva era de las novias con capa

La boda de Gwyneth Paltrow y el escritor y productor de televisión Brad Falchuk tuvo lugar el pasado 29 de septiembre y gracias a las fotografías que la actriz y fundadora de Goop compartió en internet, se revelaron los secretos mejor guardados de aquel día: sus dos vestidos de novia. El primero, un Valentino con el que la protagonista de Shakespeare in Love dio el 'sí, quiero' a su prometido. Un romántico diseño que dio paso, al caer la noche, a un nuevo modelo. Al igual que hiciera Meghan Markle el día de su boda, la intérprete estadounidense contó con la ayuda de Stella McCartney para su segundo estilismo, más rockero y cómodo con el que bailar hasta altas horas de la noche. Su corte mini y su silueta con capa confirma lo que ya predijo el portal Etsy en un estudio realizado a principios de año: este accesorio va a ser una de las tendencias más punteras de la temporada. Llegará con aires renovados, permitiéndose la licencia de prescindir de las clásicas capuchas, tal y como podemos comprobar en el minimalista diseño de la intérprete.

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