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De todas las joyas que vas a llevar en la vida, tanto si eres una adicta al bling bling como si luces el mismo anillo solitario en la mano desde hace años, pocas van a llamar tanto la atención como las de la etapa que va desde el anuncio del compromiso hasta la luna de miel. Depués del 'sí quiero', la alianza aún seguirá despertando curiosidad, tanto si es una banda sencilla como si está engastada con diamantes o si lleva una inscripción en el interior, aunque, siendo sinceros, tenga algo menos de gracia que el anillo de pedida.
Las manos son protagonistas desde el momento en que te sacas el primer relfie (o lo que es lo mismo, el primer selfie de la mano con anillo de por medio), hasta que sales por la puerta de casa cargando con las maletas en dirección a la sabana africana, Cancún, las islas griegas, Sydney o cualquier otro destino insólito de luna de miel. Sea como sea, las manos deben estar siempre perfectas y siempre listas para responder a la pregunta de ¿y cómo es el anillo? con un simple vistazo. Te proponemos cuatro 'mani-looks' para cuatro situaciones diferentes en el tiempo que va desde el compromiso hasta después de la honeymoon.
LA PRE-NOVIA Y LA NOVIA
El relfie ha sido una de las tendencias nupciales más potentes de los últimos años (si te manejas en redes sociales, seguramente sea de lo primero que compartas relacionado con la boda), e incluso ayudó a ponder en órbita la novedad de las sesiones fotógráficas de compromiso con fotógrafo profesional. El nail art en este caso debe complementar al anillo y cederle todo el protagonismo, aunque podemos permitirnos algunas licencias como glitter o una manicura francesa invertida, con nudes y negro en la punta de la uña o incluso en la media luna. Para la novia-novia, la que camina al altar con ramo en mano: manicuras hiper neutrales que no resten protagonismo al vestido blanco, y manos de pieles perfectas y muy cuidadas. La de la imagen añade un pequeño twist cambiando el esmlate de uñas con brillo por uno mate.
Para la pre-novia: laca de uñas Le Vernis de Chanel, en Black Satin, o sea, negro profundo, y Dior Vernis en color siena (24 €). Clutch de cuero con piel de pelo en negro/ nude, de Topshop (68 €). Para la novia: alianza de oro amarillo y diamantes de Chopard (p.a.c.)
PARA LA DESPEDIDA DE SOLTERA
Una girl's night out en toda regla: desafía todas las normas de la manicura bridal con un cambio radical a lo Cara Delevingne, y uñas en negro noche con acanado en brillo o mate, acompañado de un maquillaje de ojos estilo cat-eye. Perfecto para cualquier situación, pero muy especialmente para una noche de chicas, despidiendo juntas la soltería.
'Get the look': laca de uñas Le Vernis de Chanel en Black Satin. Anillos de plata de Tiffany's en forma de lacito enroscado y con la palabra love en torno al dedo, este último diseño de Paloma Picasso (230 y 210 € respectivamente).
PARA LA LUNA DE MIEL Y LA POST-NOVIA
Para la luna de miel nada como inspirarse en Grace de Mónaco y su viaje de novios a las Islas Baleares junto al prínicipe Rainiero: la suya fue una historia de amor digna de celuloide, y su viaje tras darse el 'sí quiero', ella vestida con un diseño que aún sigue vigente hoy en día, fue sencillo y chic. Las manicuras de la época llaman a un rouge potente, que podamos llevar durante toda la luna de miel, independientemente del destino. Una vez volvamos a casa, y la alianza sea la única protagonista: vuelta a las manicuras de fantasía, con metalizados que complementen el del anillo.
Para la luna de miel: laca de uñas Dior Vernis en color rojo fuego (24 €). Minaudiere de corcho con cierre en forma de corazón, de Diane von Furstenberg. A la venta en Net-A-Porter (310 €). Sortija doble de plata con baño de oro rosa, de Ararat (55 €). Para la post-novia: esmalte de uñas en oro metalizado de Essie (7 €). Pañuelo de seda con estampados de colores para llevar en la muñeca, de Kate Spade (130 €).
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