En los últimos meses ha cobrado más fuerza la teoría de que entre Justin Bieber y Selena Gómez existe algo más que amistad. Las imágenes de ambos navegando en un yate por el Caribe, ajenos a miradas indiscretas, nos dejaron gestos de lo más significativos que dieron la vuelta al mundo: un beso en la mejilla, abrazos, una caricia fugaz… Comportamiento que provocó una reacción un tanto desproporcionada de sus fans –llegaron a amenazar a Selena-, que no están dispuestas a compartir ni una pizca de este nuevo ídolo de masas.
Un desayuno, un paseo en pareja, Selena escondida entre bambalinas en uno de los conciertos de Justin, una cita para ir al cine, las ocasiones en las que se les ha visto juntos se multiplican, aunque los dos se empeñan en desmentir los rumores de algo serio. Ya la estrella Disney dijo en diciembre que sus encuentros “eran inocentes”, simple coincidencia, y ahora ha sido el propio Bieber quien ha definido lo suyo como amistad y nada más. En el programa de radio de Ryan Seacrest, Justin dijo: “Selena es una de mis mejores amigas”.
Comprometido o no, Justin ha comenzado 2011 con un montón de proyectos: un par de papeles en la conocida serie CSI, un disco que incluirá remezclas de sus temas más coreados, la emisión de la película documental en 3D titulada Justin Bieber. Never say never, que se estrena el día 14 de febrero… Y es que su éxito de momento no tiene techo.
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