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Ya tengamos dudas sobre cuáles son las próximas tendencias que veremos en los escaparates (o en la web de nuestras tiendas favoritas) o bien de los básicos que no pueden faltar en nuestro armario, Lucía Rivera puede resolvernos ambas preguntas. Y es que la modelo no es una maniquí al uso. Su pasión por la moda va mucho más allá del trabajo que pueda realizar en la pasarela o delante de las cámaras. La hija de Blanca Romero es toda una trendsetter y lo demostró hace unos meses siendo de las primeras en apostar por los botines de suela track. Con el cambio de temporada cada vez más cerca, su estilo se está adaptando a las nuevas temperaturas y en su último look no solo nos presenta una mezcla perfecta para estos días del final del invierno, también reivindica la moda española al estrenar unos pantalones de una de las firmas más conocidas del país: Mango.
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Es la firma que ha enamorado a mujeres de todo el mundo como Katie Holmes la que ha convencido a Lucía de que los vaqueros de esta primavera no serán los clásicos denim azules que todas tenemos en el armario, sino un diseño muy poco conocido (pero igual de favorecedor, eso sí). Lejos de anchuras skinny, la maniquí ha apostado por un modelo acampanado de cintura alta en color marrón, una tonalidad neutra que se convertirá en el todoterreno del armario al funcionar con colores más llamativos y toda clase de estampados.
El reivindicativo mensaje de la camisa
De hecho, Lucía puso a prueba su versatilidad combinando los pantalones de 39,99 euros con una camisa de print diplomático, un diseño azul con franjas blancas firmado por MVP Wardrobe. Y, buscando la prenda en la página web -sigue disponible en todas las tallas por 169 euros- nos ha llamado la atención comprobar que el nombre que recibe es el de My boyfriend shirt (que se podría traducir por 'La camisa de mi novio'). Apostando por este diseño, la maniquí demuestra que no necesita tener una relación de pareja para poder recurrir a las prendas estrella del armario masculino, todo lo contrario. Es tan sencillo hacerse con un diseño de este estilo como escoger un corte ancho.
Zapatillas como broche
Si ya de por sí las dos prendas daban lugar a una mezcla comodísima -sobre todo si tenemos en cuenta que debajo de la camisa llevaba una camiseta blanca de tirantes, otro básico imprescindible-, Lucía le puso el punto final a la combinación con unas zapatillas de cordones. Y es que por mucho que le gusten los botines, es una firme defensora de las sneakers en estilismos a medio camino entre looks casuales y algo más sofisticados. Unas Adidas Samba blancas (71,95 euros) le rebajaron puntos de elegancia a la americana negra dando lugar a una composición perfectamente equilibrada, que lo mismo sirve para tomar algo con las amigas en una terraza que para atender una videollamada.
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